Mis reflexiones

Estamos viviendo un siglo donde la longevidad es la norma. El desarrollo y la ciencia nos ha permitido vivir más y mejor. La edad cronológica, es decir los años que han transcurrido desde nuestro nacimiento no es lo que cuenta. Lo importante es la edad biológica determinada por el estado funcional de los principales órganos del cuerpo y de la mente.

Es por eso que todavía muchos de los líderes de países desarrollados son personas de edad avanzada. Eso revela que el conocimiento unido a la experiencia son todavía factores claves para el manejo adecuado de las naciones y las empresas.

Es crucial entender esto pues así como la ciencia y la alimentación han logrado extender la edad máxima de los seres humanos, también la tecnología y la globalización han influido a que las distintas generaciones sean cada vez más diferentes. Este fue el caso de las generaciones de los millennial con la centennial. Esas diferencias generacionales se acentuaran más con los nacidos después del 2010,º que es la generación ALFA.

Una generación que no lee y cuando lo hace solo ve los titulares.

Una generación que no lee y cuando lo hace solo ve los titulares.ARCHIVO/LD

La realidad es que hoy en día estamos frente a una juventud diferente y posesionada en importantes cargos públicos y privados. Esta es la de los llamados NINIS (Millennial) que nacieron entre 1980-95. Este grupo generacional es muy materializado y en su generalidad no tiene interés ni lealtad al país de origen. Como clase estudiantil no tiene “conciencia de clase.”

No les gusta trabajar mucho ni tampoco tienen apego a las empresas donde trabajan. Poseen varias nacionalidades y residen donde más les convenga. No leen y cuando lo hacen solo ven los titulares. Las redes sociales y plataformas como Instagram es donde transcurre gran parte de su tiempo. No tienen ideología ni un pensamiento profundo y mucho menos una gran experiencia.

Esto me llevó a buscar un pensamiento de Octavio Paz premio Nobel de Literatura. Este dijo “Debemos buscar la reconciliación de las dos grandes tradiciones de la modernidad, el liberalismo y el socialismo.” Comprender estas realidades es importante para el devenir de nuestra nación.