¡Fascinados con Margarita!

Antes de ser realizadas y conocidas las dos últimas encuestas de preferencias para las elecciones de 2020, incluida una privada hecha por el empresariado nacional, había escrito que el país está fascinado con Margarita Cedeño y con la posibilidad de que sea la primera mujer en ocupar la Presidencia de la República. Dije y repito que he visto de cerca a la Vicepresidenta una sola vez en una Feria del libro y era entonces primera dama. Pero soy periodista y me gusta bajar al pueblo, ir a los barrios, a los parques y tomar, cuando puedo, un motor y recorrer como pasajero lugares donde hablo y oigo a las personas, ahí está la verdad, y ella es una fascinante realidad política por méritos propios que el gobierno y el PLD tienen que tomar en cuenta.

Nadie le va a regalar nada a la doctora Cedeño, todo lo tiene ganado, su labor social antes como primera dama, y después como brillante y solidaria vicepresidenta de Danilo Medina son sus avales para optar por ser quien encabece la boleta morada en un acuerdo político más que inteligente entre el liderazgo del partido gobernante.

Dije antes y repito ahora, su voy pal’pueblo, su don de gente, su solidaridad sin más razón que el amor por los demás y su condición de cristiana militante en la fe del divino hacedor de todas las cosas la han llevado a la preferencia de un pueblo inteligente y deseoso de seguir trillando el camino del progreso ahora en las manos de una mujer de grandes condiciones.

El camino es largo y tendrán que entenderlo los que se obnubilan y no ven lo cerca que tienen la solución a un enfrentamiento poco inteligente cuando el poder está en juego. El país, desde los menos favorecidos por la suerte, hasta sectores importantes y determinantes están fascinados con Margarita Cedeño, una mujer que ha sabido estar en las alturas del poder con la humildad y el desinterés de quien sabe y entiende que todo viene del pueblo y que al pueblo es que hay que servir con entrega y amor, con la verdad y el desinterés en una entrega por mejorar las condiciones de vida de los que nacieron sin nada.