Los Salmos y la corrupción

Esta es nuestra entrega No. 33 sobre esta temática, y será ya la última.

El salmo 146 invita a que se tome este tema de la corrupción en serio y que se pueda ser astuto.

Con esa referencia, yo quiero citar al Papa Francisco, que tiene estas dos hermosas frases: “Ante la astucia de la corrupción, se debe responder con la astucia cristiana”.

Los cristianos que defi enden la honradez como un gran valor, y aunque no sean cristianos, todo ser humano que quiere ser honrado en el fondo, quiere ser lo que Dios quiere. Ahora bien, hay que ser astuto también frente a esta realidad de la corrupción, porque invita, porque quieren que todo se corrompa.

De esa manera, si todos son iguales, será lo mismo, y podemos todavía preguntarnos con el Papa: ¿Qué ocurre si la astucia de los corruptos se vuelve más efectiva que la astucia de los cristianos? Si esa astucia triunfa, eso signifi ca una gran decadencia, porque donde hay corrupción todo se daña, está podrido.

Tocamos este tema porque es pan nuestro de cada día en América Latina.

Hay que repetir con los grandes expertos: “Cuanta más corrupción hay, más pobreza hay”. Hay que ser astuto en la lucha contra la corrupción, como dice el Papa, y a los cristianos se les invita a ser astutos y a repetir lo que dijimos una vez: no dejarse seducir por este mal que signifi ca corrupción, podrirse.

Hasta mañana, si Dios, usted y yo lo queremos.