Pena y vergu¨enza...

Aparte de violatoria, la Constitución, que consigna educación como un derecho de primer orden, la decisión de la Asociación Dominicana de Profesores (ADP) de paralizar las aulas en su negativa, a que la designación de 18 directores regionales y 122 distritales sean elegidos mediante ternas, es penosa, insolente y vergonzosa.

En noviembre del año pasado el ministro de Educación, Andrés Navarro García, emitió la ordenanza 24-2017, mediante la cual establece el mecanismo de ternas para las selecciones de esos funcionarios, pero la ADP se aferra a que el proceso se siga haciendo por concurso. Algo que si bien pudiera considerarse como una actitud inmadura de quienes se obstinan al legalismo, y más propia de niños que de maestros, en el fondo es mucho más que eso.

Y es que el proceso de ternas, si bien no está taxativamente nombrado en la Ley 64-97 de Educación, no solo mantiene el espíritu competitivo del concurso, sino que lo amplía y optimiza al exigir a los proponentes constancias de capacidad y preparación para escoger tríos entre los que saquen las 9 mejores calificaciones para de allí sacar lo mejor de lo mejor.

En otras palabras, un procedimiento en virtud a los méritos y las competencias del postulante pero que va en contra de la socorrida práctica (de todos y de siempre) de designar muchos de esos mandos en base al amiguismo y al clientelismo. Vale destacar que las posiciones en cuestión no son de las denominadas de carrera, sino de simple designación por tanto los movimientos de personal pueden ser perfectamente realizados de manera administrativa.

El irrespeto institucional de la ADP y su presidente Eduardo Hidalgo, llega tan lejos que a los dos días de someter un recurso al Tribunal Superior Administrativo, le hacen un llamado al presidente de la República para que intervenga en un asunto que ellos mismo judicializaron y que está pendiente de fallo.

Afortunadamente y aunque por miedo a represalias no lo exterioricen y acaten los desmandes, no todos los maestros piensan como algunos de sus dirigentes, y una muestra de ello son los más de 1,500 expedientes que han sido recibidos para un proceso que busca mejorar la necesaria relación de enseñanza- aprendizaje.