Fidel Soto habla del acto en Las Manaclas

Fidel Soto fue secretario general de la Unión de Estudiantes Revolucionarios, UER (1967-1970), durante el balaguerato represivo de los 12 años. Fidel fue cuadro político del MR ‘14 de Junio’. Heredó las inquietudes sociales de su padre Miguel Soto, emblemático sindicalista. Fidel asistió a Las Manaclas y escribió lo siguiente:

“El sábado 9 de diciembre, hombres y mujeres concurrieron al ‘Alto de la Diferencia’, Las Manaclas, donde el 21 diciembre de 1963 fueron asesinados 16 guerrilleros del Frente Enrique Jimenes Moya. En otros cinco frentes cayeron 13 catorcistas.

“La concurrencia reiteró que el espíritu revolucionario de esos mártires no se apagará jamás”.

“Entonando el himno del 1J4, en esas ‘Escarpadas montañas’, rindieron el justo, verdadero y merecido homenaje a la Raza de los Inmortales”.

“Fue una demostración diferente a las celebraciones hipócritas del oficialismo vergonzante que pretende escudarse en una tal Comisión de Efemérides Patrias para hacer creer al pueblo que los detentadores del poder rinden homenaje a quienes se sacrificaron por los derechos y la libertad”.

“En verdad, ¿cuál es el verdadero homenaje que merecen los revolucionarios caídos?

“Si es un monumento, está bien. Si es una canción, una poesía, un escrito, un discurso, un acto y otra manifestación rememorativa, está bien”.

“Pero el VERDADERO homenaje reside en mantener una lucha constante y decidida contra las injusticias y los privilegios, por la permanencia de un Estado de Derecho, respetuoso de la Dignidad Humana; porque a fin de cuentas esa fue la causa de su incesante lucha, martirio y sacrificio”.

“No es por moda o casualidad que entre las personas que acompañamos a Raúl Pérez Peña (Bacho) al tributo de recordación, organizado por la Fundación Testimonio, estuvieran la viuda y la hija de Alfredo Parra Beato, la hija de Tulio Arvelo, y varias compañeras y compañeros que no reniegan de la justa y noble causa de los guerrilleros del 28 de noviembre de 1963”.

“La bandera de los héroes de la Raza de los Inmortales está abonando la tierra de Las Manaclas, esperando que algún día los brazos poderosos del pueblo la levante con más firmeza para batir las injusticias, los privilegios, la corrupción y el crimen”.