Santo Domingo 23°C/26°C thunderstorm with rain

Suscribete

EL BULEVAR DE LA VIDA

En bandolera

LA DE NERUDA En carta desde Capri, el capitán Neruda escribió a la Matilde: “Una pregunta, amor, te ha destrozado”. Pues mire usted que las preguntas de estos días aciagos, nada tienen que ver con el amor, sino con el odio, nada con la Matilde de cada quien, ay, sino con la náusea de cada cual en cada día. Oiga, que sin llegar a Serrat, anda uno cansado de estar “harto ya de estar harto”, y de ver cómo puede, por ejemplo, cualquier bufete mediático-jurídico con malos fines, ver lo que el Ministerio Público y su PEPCA es incapaz de ver, aunque lo publique Felivia Mejía en Diario Libre, o lo presenten Ortega y Piera en sus medios. Cuanto antes, al Ministerio Público y su PEPCA hay que regalarle suscripciones a los diarios nacionales, y una TV con cable gratis para que puedan ver los programas de investigación y hasta los “programas” de “periodistas” socios del bufete correspondiente donde, enterados del trapicheo en tal o cual ministerio o dirección general, acuden los personajes a advertir que habrá sometimientos y luego el mensajero llamará dos veces, como en la peli, pero con otros fines.

EL ANTICIPO DE CELAYA Tal que, como ocurre ahora en la OMSA, donde desde 2013 era de público conocimiento lo que hoy es cínico escándalo, así mismo está pasando en más de una institución del Estado. Pero tendrá que llegar un chisme interno, una novia en ataque de celos, o lo peor, la jodida parca, o sea, teñirse de sangre el drama de simple corrupción, para que las autoridades se enteren de lo enterado y conozcan lo conocido, perdón por el gadejo. Todo lo que iremos conociendo en detalles en los próximos días, es un viejo striptease que los asiduos a santo lugar del Malecón hemos disfrutado ya. Las auditorías de la Cámara de Cuentas están ahí. Los hemerotecas son libres. (El mundo es un pañuelo que cabe en las manos del Dr. Google). Los programas de Ortega y Piera se siguen emitiendo como siempre, por Color Visión, “tenía que ser”, o sea, que todo está dado para que puedan las autoridades actuar, pero ya ven. Dale que te pego, y debo pedir perdón, porque una vez más voy a citar al más citado poeta, don Gabriel Celaya que, en un verso de 1955, resumió la situación ética de la sociedad dominicana 2017, sin saberlo (los poetas verdaderos siempre anticipan a los tiempos): “Porque vivimos a golpes/, porque apenas si nos dejan decir que somos quien somos/, nuestros cantares no pueden ser sin pecado un adorno/. Estamos tocando el fondo. Estamos tocando el fondo”.

“DESDE CUÁNDO TE ESTARÉ ESPERANDOÖ”. Hace unos días, le comentaba a algunos de los encartados del caso Odebrecht, que toda la innecesaria saña con la que el Ministerio Público les fue a detener a sus hogares, aquella madrugada (salvo el caso de Ángel Rondón, que tomó la precaución de adelentársele), fue en verdad la única acción en su contra de parte del Ministerio Público, pues el expediente en base a cuyas pruebas un juez habrá de determinar su culpabilidad o inocencia, tiene más falencias e inconsistencias que el dictado tomado por un ignaro señor ágrafo y monosilábico, lo que nos lleva al mismo lugar donde lo dejamos, nos presagia tempestades verdes, y no las de ONAMET, y nos anuncia que todo está armado para que siga rodando la rueda que rueda y rueda. ¿Hasta cúando soportará la sociedad dominicana está incitación reiterada a la delincuencia generalizada que es la impunidad, porque en el ministerio público no tienen tiene tiempo para leer a Felivia en Diario Libre, ni ver los programas de Ortega y Piera en Color Visión? Como ven, hay momentos en estos bulevares en que, cuál don Mario, “es difícil decir algo que no sobre”. Con su permiso.

Tags relacionados