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PUNTO DE MIRA

Torpedean a Rosario Márquez

El retiro de la visa norteamericana al presidente de la Junta Central Electoral, Roberto Rosario Márquez podría ser un disparo en la santabárbara a su continuidad al frente del organismo.

La información se conoce en el momento en que el Senado se aboca a la designación o ratifi cación del presidente de la JCE. Dos funcionarios norteamericanos visitaron a Rosario Márquez para notifi carle la cancelación de las visas que tenían sendos pasaportes; uno ordinario y el diplomático que usaba Esas acciones trascienden para enmarcar negativamente al afectado.

Estados Unidos tiene todo el derecho al retiro de las visas a personas que afecten sus intereses. Esto es el pleno ejercicio de su soberanía. Creo que únicamente se puede obviar ese impedimento si fuera embajador ante las Naciones Unidas. No estoy seguro.

Tampoco pienso que para fuñir el gobierno dominicano colocará en tal posición a Rosario Márquez.

Al embajador James Brewster se le asigna la diligencia que suprime el visado. Se alega que es la resultante de los enfrentamientos personales entre ambos. Ya Rosario Márquez había adelantado que esto podría pasar. Las divergencias se agudizaron en el proceso electoral. El presidente de la JCE rechazó admitir como observadores un contingente que la legación diplomática había designado para obtener tales calidades. Lo que resalta es quién será el nuevo presidente de la JCE. Siempre el ejecutivo de este cargo ha sido alguien vinculado, aunque fuera de forma disimulada, a las instancias gubernamentales.

Si el Senado opta por mantener al actual funcionario sería un mentís de que Rosario Márquez sea enemigo de los Estados Unidos. Lo contrario parecería que la Embajada le tumbó el pulso al gobierno. Las circunstancias colocan a este ciudadano como piedra de discordia.

Todos en el país saben que el retiro de la visa es una acción política, no es por la comisión de un delito. Rosario Márquez salta a la palestra como una diana de las acciones de la embajada que reta al gobierno dominicano a dejarlo fuera de las opciones de dirección para la JCE. El Senado hace el procedimiento, pero es el PLD, principalmente el Presidente de la República, quien señala al benefi ciario.

En el pasado hubo cancelaciones de visado a Guido Gómez y Amable Aristy.

Ambos corrigieron la situación. Diligencias similares hará Rosario Márquez.

Quizá el año próximo designen otro embajador y termine el diferendo

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