Japón busca que los jóvenes quieran tener hijos, ofrece mayores salarios y asistencia a familias

Lo que se busca es una sociedad que permita criar a los niños sin estrés y donde los jóvenes que quieran casarse y tener niños, puedan hacerlo

El primer ministro nipón, Fumio Kishida, dijo este viernes que su Gobierno tomará medidas para aumentar los ingresos de las familias jóvenes y proporcionar asistencia a la crianza con el fin de frenar el importante descenso en natalidad que "amenaza la funcionalidad del país".

Kishida avanzó así los detalles de un plan que lanzará a finales de marzo y que, según dijo, incluye también el objetivo de cambiar la estructura de la sociedad con el fin de que las familias se sientan más aceptadas en el país.

"Lo que se busca es una sociedad que permita criar a los niños sin estrés y donde los jóvenes que quieran casarse y tener niños, puedan hacerlo", añadió el mandatario, quien dijo que el país "debe poner a los niños como prioridad".

Entre algunos de los objetivos que destacó Kishida se encuentra fomentar que los hombres tomen baja de paternidad, algo que normalmente no se produce en las empresas japonesas por temor a represalias o críticas de compañeros y superiores, pese a que el país cuenta con una normativa altamente garantista para estos casos.

También añadió su intención de aumentar las ayudas para el cuidado de los hijos, de modo que tanto los hombres como las mujeres que tomen esta baja puedan obtener el mismo nivel de ingresos netos que tenían antes de la misma.

"Si esta situación continúa, la economía de nuestro país se contraerá y será difícil mantener el sistema de seguridad social y las comunidades locales. Los próximos seis o siete años serán la última oportunidad para ver si podemos revertir la tasa de natalidad decreciente", concluyó el mandatario.

El primer ministro ya dijo el pasado enero que centraría sus políticas sociales en apoyar la crianza de los hijos, con el objetivo de revertir la rápida caída de la natalidad en el país.

Japón registró en 2021 un mínimo histórico de 811.604 nacimientos y, a la espera de la publicación de los datos oficiales, se estima que la cifra cayó por debajo de los 800.000 en 2022. Para abordar esta tendencia, que unida al rápido envejecimiento de la población (en torno a un 30 % de la población del país supera los 65 años) plantea una encrucijada demográfica para Japón, Kishida busca aumentar las normativas y subvenciones para la crianza.

Japón tiene previsto inaugurar en abril la Agencia de los Niños y Familias, un organismo gubernamental destinado a supervisar las políticas infantiles del país, de gestión muy descentralizada.

Coincidiendo con la instauración de esta agencia, el primer ministro japonés se ha comprometido a compilar para junio una serie de medidas y propuestas que buscan duplicar el presupuesto relacionado con la crianza de los hijos, y ha encargado al ministro a cargo de las cuestiones de natalidad que trabaje en ello.

El Gobierno ha adelantado ya que concederá una ayuda para cubrir los altos costes de los partos en el país, así como un sistema de becas educativas.

Tags relacionados