Unas muertes “poco publicitadas”

El director del cuerpo élite de la policía colombiana, encargado de la protección de líderes sociales, el coronel José Restrepo, informó el 11 de este mes que al menos 178 activistas han sido asesinados, desde noviembre de 2016, fecha en la que fue firmada el acuerdo de paz entre el Gobierno y las FARC.

Sin embargo, la paz no ha sido tan amplia, pese a la fanfarria de Bogotá.

Uno de los grupos que se opuso a los acuerdos, el Frente Olivier Sinisterra, decidió no seguir la corriente ni la alegría y realiza acciones contra los líderes sociales, aquellos que son considerados una “amenaza” para el grupo ilegal. Por favor, no hablemos de ideología. El vandalismo se la llevó.

Dentro de esas ilegalidades del grupo dirigido por Walter Patricio Arizala Vernaza, alias “Guacho”, se encuentra el secuestro y asesinato del equipo del diario ecuatoriano El Comercio, el fotógrafo Paúl Rivas, el periodista Javier Ortega y el chofer Efraín Segarra, así como la muerte de la pareja ecuatoriana, ”scar Villacís y Katty Velasco, también secuestrada y asesinada, cuando se desplazaban por la provincia de Esmeraldas, en la frontera con Colombia.

Ayer, el mismo grupo disidente asesinó a tres miembros de una fiscalía en el suroeste del país, aunque en este caso los fiscales regresaban de un operativo contra grupos de narcotraficantes.

Las muertes de los defensores de los derechos humanos hicieron que Amnistía Internacional reprochara el silencio cómplice del Estado, en manos del presidente actual, Juan Manuel Santos y del mandatario electo, Iván Duque, y del manto de impunidad de los asesinatos.

Pero el grupo de “Guacho” no es el único responsable. También se señalan a organizaciones criminales como el Clan del Golfo y la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN), aún vigente.

La cifra de muertes también cambia, dependiendo del que ofrezca las declaraciones. La policía asegura que las víctimas fueron 178, pero la Defensoría del Pueblo sostiene en un informe que desde el primero de enero de 2016 hasta el 30 de junio de 2018, la cifra “exacta” fue de 311.

Con el “Velatón” del viernes 6 pasado, salió a la luz que la paz en Colombia no ha llegado a la lejanía de las comarcas.