Gastronomía

Los sabores de Nueva Orleans

Frituras de cocodrilo (‘Alligator poppers’) y Jambalaya. ALEXIS RAMOS B.

Frituras de cocodrilo (‘Alligator poppers’) y Jambalaya. ALEXIS RAMOS B.

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Carmenchu BrusíloffSanto Domingo, RD

‘Adonde fueres haz lo que vieres’, dice un refrán. Intento seguirlo a pie juntillas durante mi estadía en Nueva Orléans, probando platos de las cocinas cajún y creole: cocodrilo, sopa gumbo, jambalaya, ‘crawfish’ (especie de langostino que crece en el barro de agua dulce)...

Con mi hijo Alexis echo un vistazo a varios locales hasta elegir el New Orleans Seafood & Hamburger Co., en la calle Decatur 541, esquina Toulouse. El balcón en su segundo piso luce primaveral punteado de rojos parasoles y flores. Desde allí puedo ver el edificio Jackson Brewery, antigua sede de la cervecería Jackson. Pero en vez de quedarme al aire libre prefiero el aire acondicionado del salón. El ambiente es informal, pero los camareros son atentos. Ordeno ‘Alligator poppers’ y Jambalaya.

El primero son frituras redondas de harina rellenas de cocodrilo. Las degusto con fruición. El segundo, una combinación de arroz, camarones, jamón, pollo, apio, azafrán, cebollas, tomates y especias algo picantes. Me agrada su sabor.

Los platos Al día siguiente, a la hora de almorzar entramos al Café Pontalba, en la calle Peter 546. El restaurante se promociona como cocina creole y cajún.

Funciona, según reza el menú, en ‘el más antiguo edificio de apartamentos de América’, es decir, de Estados Unidos, data de 1849. En realidad, son dos edificios gemelos, Pontalba Inferior y Pontalba Superior, levantados uno frente a otro, en ladrillo rojo y balcones con rejas de hierro, fabricadas en Francia.

En ellas aparecen dos iniciales: AP. Hacen referencia a Micaela Almonester, baronesa de Pontealba, quien ordenó la construcción de los edificios.

Elegimos platos que para nosotros son novedosos y algunos que ya probamos: Jambalaya, ‘crawfish’ pie (empanada) y Gumbo, una sopa espesa con camarones y salchichón coronados por arroz blanco. (Otro día me toca como acompañante del Pollo ennegrecido, en el restaurante Pat O’Brien’s).

En Pontalba ordenamos además Blackened 6 ounce flat ironsteak (Carne Flat estofada y ennegrecida) con patatas (papas) y vegetales cajún. (Ennegrecen las carnes cocinándolas con ciertas especias). Mientras comemos, las interpretaciones de músicos ambulantes en la Plaza Jackson atraviesan los ventanales. No es de extrañar. Estamos en el French Quarter de Nueva Orleans...

Desde el balcón puede verse el edificio Jackson Brewery. CARMENCHU BRUSÍLOFF