Día Mundial del Folklore es hoy

El Día Mundial del Folklore no está incluido en la lista de los días internacionales y/o mundiales asociada con la Unesco. Si buscamos en la Internet encontraremos que muchos países lo repiten.

En este aspecto se podría considerar algo folclórico, porque esta afirmación se ha transmitido de generación en generación, nadie sabe su origen, porque no aparece avalada en ninguna declaración oficial, no aparece en la lista de la UNESCO el registro de ese Día Mundial del Folklore. No solo en República Dominicana se incurre en el error de atribuir esa declaratoria a la Unesco, basta navegar en la web para ver cómo otras naciones hacen lo mismo los 22 de agosto y si se solicita información a las instituciones que deberían conocer el dato, no se encuentran respuestas y se limitan a buscar en internet y repetir el error. ¿A quién se le ocurrió que la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura instituyó ese día? Lo repetimos porque a alguien se le ocurrió decirlo o escribirlo un día y seguimos coreando por uso y costumbre sin investigar. ¿De dónde sacan tal afirmación? La declaratoria del Día Mundial del Folklore tuvo su origen en el primer Congreso Internacional del Folklore, organizado en Buenos Aires, Argentina, en 1960, por Augusto Raúl Cortazar, presidente de la Comisión Internacional Permanente de Folklore, también instituida en ese foro, en el cual, por el voto unánime de representantes de 30 naciones se recomendó que se conmemorara en todo el mundo el 22 de agosto “Día Mundial de Folklore”, como está escrito en mi monografía “Cronología del folklore”, que publiqué en agosto de 2012. Vamos hoy a resaltar este día reflexionando sobre nuestro folklore, que son nuestros saberes, exhibiéndolo, difundiéndolo y exaltándolo, sin permitir manipulaciones de sectores que quieren inyectarnos otras culturas, porque somos vulnerables a los cambios. ¡Pues no! debemos conocer lo nuestro para apreciarlo, amarlo, cuidarlo, preservarlo y que nos sintamos orgullosos de lo que nos pertenece como nación e investigar, antes de asumir como buena y válida una información. También debemos documentar con fecha (día, mes y año) los hechos, como fotografías, afiches, cartas, libros y todo lo que consideremos importante para la posteridad.