Un espacio muy especial

El Centro Tomatis definitivamente es un lugar muy especial. Con la implementación de su terapia “mágica”, como la definen sus expertos, han logrado transformar la vida de cientos de niños con diferentes diagnósticos a través de la motivación.

Aunque, en su mayoría, trabajan con niños, este centro ofrece asistencia a un amplio rango de edades y tipos de problemas. Este espacio, que funciona en Magia Landia, en el centro comercial Sambil, se caracteriza por brindar un trato personalizado a cada persona mediante la utilización de la Terapia de Estimulación Auditiva (Tomatis). Como protocolo principal, se estableció la participación directa de los representantes en las terapias, ya que a pesar del principio de que todo niño es un ente individual, no está desligado de su entorno familiar, por tanto su familia juega un papel principal en su rehabilitación en alianza con el terapeuta.

Las ventajas fundamentales de este sistema radican principalmente en que el equipo de terapeutas interactúa diariamente no solo con el infante, sino, con su familia, lo que da más herramientas observables al terapeuta, pudiendo determinar con más detalles, causas y recomendar las acciones con más precisión, teniendo como resultado que la práctica con el método Tomatis se vea potenciada.

De acuerdo con César Pérez, neuropedagogo del centro, la mayoría de los niños que entra ya tienen un diagnóstico. Sin embargo, cuando no lo tienen se les da una guía a los padres para que vayan al lugar correspondiente donde deben ser evaluados, y dependiendo de este poder determinar si requieren las terapias o no.

El lugar está capacitado con equipos de estimulación neurosensorial. Los dispositivos cuentan con tecnología avanzada para producir de manera óptima el efecto Tomatis, a su vez combinados con juegos y actividades para que los niños puedan aprender mientras disfrutan y comparten con los demás.

¿Cómo trabaja? Muchas personas tienden a confundir este método con terapia del lenguaje, lo cual en parte es cierto, sin embargo, este método va más allá.

Tomatis trabaja con la parte cognitiva del cerebro. ¿Qué hace este con el órgano auditivo? Prácticamente ocupándose de la parte emocional que tiene el cerebro y de tres grandes trastornos como son las emociones, el lenguaje y la comunicación.

“Se somete al niño a una serie de frecuencias que van de graves a agudos y viceversa, durante todo el tiempo que dure la sesión terapéutica. Combina la sesión terapéutica con el equipo, que son los auriculares con un pequeño vibrador en la parte superior de la cabeza”, explica Pérez.

Mediante éste, se envían ondas para ser captadas mediante el hueso, lo que se conoce como conducción ósea y luego hacen que el niño lo perciba a través de los oídos.

Cabe resaltar que en esta institución se enfocan en no etiquetar a los niños por sus condiciones especiales. “Es cierto que hay parámetros que hay que seguir con algunas patologías, sin embargo, los avances que hemos logrado en los niños, nos llevan a afirmar que no podemos ponerle techo al cielo. No podemos limitar a nuestros hijos poniéndoles una etiqueta”, resalta el experto Pérez.

((Método ¿Cómo evalúan? En primer lugar se hace una prueba de escucha y luego los consultores se encargan de crear terapias individualizadas, dependiendo el problema que tenga el niño. Este método no solo es eficiente en infantes, sino que también ayuda a adultos a tratar problemas de concentración y estrés. De acuerdo con César Pérez, neuropedagogo del centro, es importante destacar que el no escuchar a una persona a veces va más allá de lo que se puede percibir.

Generalmente este tipo de problemas se da porque se bloquea la audición, y se hace necesario prestarles atención, puesto que si no son tratados a tiempo pueden llevar a problemas psicológicos.