En nuestro tiempo hacíamos festivales

En las noticias leemos que en la primera noche del Festival Presidente, celebrado en el Estadio Olímpico, había alrededor de 50,000 personas, y a propósito de ese entusiasmo que se sentía por todas partes, y la bulla que se escuchaba, busqué y encontré un gran afiche de los muchos que conservo de aquellos shows que armaban esos grandes empresarios y amigos, don Adriano Rodríguez de Adri’s Productions y Rafael Corporán de los Santos, en los que actuábamos todos los artistas del momento. Quien escribe, María Antonietta, patrocinada por Molinos Dominicanos; Fernando Casado, Lope Balaguer, Fredy Beras Goico, Luchy Vicioso, Ángela Carrasco, Charityn Goico, José Lacay, Francis Santana, Nelson Muñoz, Aníbal de Peña y sus muchachas, Rhina Ramírez, Horacio Pichardo, Fausto Rey, Tirso Guerrero, Yuly Morales, Niní Cáffaro, Napoleón Dhimes. Ese fue en el estadio Quisqueya, el 5 de mayo; me imagino que era en el año 1971, pues anunciaban la rifa de un carro modelo de ese año, y miles de pesos en regalos.

La lista de los regalos para rifar entre el público anunciaba: una nevera Nedoca, televisores, radios, licuadoras, abanicos Toshiba, tenis Recreo de Oro, 100 fundas con los ingredientes para la comida de una semana para cinco personas.

Entre los patrocinadores figuraban Pollo Lindo, Banco Popular Dominicano, Leche Pangola, Asociación Popular de Ahorros y Préstamos, Cerveza Criolla, La Curacao, Lotería Nacional, Margarina Manicera, crema dental Colgate, Bonanza Dominicana, Seven Up, Gas Caribe, Productos Jaja, whisky Buchanan’s.

Al final, en el afiche se lee: ”Y recuerde, si lo invita Producciones Corporán, seguro que todos van”.

Estos espectáculos se hacían con bastante frecuencia en los estadios del país: Cibao, Tetelo Vargas, Quisqueya, en enormes tarimas que se preparaban para esos fines. En los pueblos donde no había campos deportivos, si éramos contratados por la Compañía Anónima Tabacalera y su marca Montecarlo, ellos transportaban su enorme entablado. Recuerdo una noche en la que como de costumbre actuábamos Lope Balaguer, Milton Peláez, Freddy Beras Goico y yo, y el pedestal se cayó con todo y la reina de las fiestas patronales, que era lo que se celebraba ese día. Creo que era cerca de La Vega. Lo que no recuerdo es adónde fue a parar el gran moño (peinado) de la joven.

Lo que sí puedo asegurar es la enorme diferencia entre lo que cobrábamos nosotros en ese entonces (hablamos de setenta y cinco o cien pesos por actuación), y las grandes sumas que se cobran hoy día. Bueno, yo compré una casa con mil quinientos que gané en diez actuaciones con la Tabacalera. Imagínese el lector. Hubo noches en que hacíamos un show aquí en la capital, otro en La Vega o en Moca y el último en Santiago.

El último era con el sol afuera.