Policía apresa a una “ilusionista”

Las calles de cualquier ciudad de la República Dominicana están llenas de personajes cuyas actuaciones los hacen protagonistas de guiones para películas similares a la argentina “Nueve Reinas “, o la española “Incautos”.

Carteristas “piadosos”, “ilusionistas“, entre otros timadores, están al asecho de que aparezca “el primer incauto”, para convertirlo en víctima de sus fechorías

Una de estos “ilusionistas” lo es Yokaira Altagracia Infante Vásquez (alias La Brenda), que, según anunció la Policía Nacional, fue apresada en Santiago de los Caballeros luego de utilizar una sustancia desconocida para “aturdir” a dos niñas, a las que luego les robó en su residencia, en San Francisco de Macorís.

Pero eso no es todo. La Policía dice que esta mujer, de 35 años de edad, que también se hace llamar Yokaira Vásquez Esteven, había sido apresada en 13 ocasiones, bajo la acusación de robo y estafa, y después “vuelve a lo mismo”.

Según el expediente, La Brenda se presentó esta semana a una residencia del barrio Los Maestros, de San Francisco de Macorís, y aprovechó que había dos niñas, hijas de la propietaria de la casa, a las que aturdió con una sustancia desconocida, y luego robó.

Las niñas aseguran que no recuerdan nada de lo ocurrido.

Es que, según el informe policial, la detenida se pone en la cara una sustancia desconocida para simular que se ha hecho un tratamiento facial denominado “peeling”, y luego hace inhalar a sus víctimas dicha sustancia que provoca aturdimiento.

Cuando las víctimas están en ese estado, La Brenda penetra a las casas de sus víctimas para sustraerles dinero, prendas, computadoras y otros objetos de valor.

En la vivienda de los Castillo Fernández, que fue el último caso, las autoridades dicen que Brenda robó una computadora, dos teléfonos celulares, un anillo de graduación de oro y 11 mil pesos en efectivo, por lo que fue puesta bajo control del Ministerio Público para los fines legales pertinentes.

El cómplice Junto a Brenda, la Policía detuvo a Luis Enrique López Almanzor, de 21 años, propietario de una tienda de venta y reparación de teléfonos celulares, a quien le fueron ocupados los objetos robados en la casa de los Castillo Fernández.