Piedras de Danilo

Aunque la silla presidencial está colmada de privilegios, suele envejecer a sus inquilinos. Fue radical el cambio físico del expresidente Leonel Fernández una vez subió en el palo hasta que le obligaron a bajarse. Lo mismo ocurre con el presidente Danilo Medina, a quien la piel se le enrojeció luego de acomodarse en el filoso asiento del Palacio.

Aparte de lidiar con tantas situaciones, el Presidente está obligado a caminar con más de una piedra en el zapato. Por ejemplo, un por ciento alto de los funcionarios comprometidos con el caso Odebrecht (y su secuela de 92 millones de dólares) pertenece a la gestión de Medina. Por cosas de la vida, ninguno de esos nombres forma parte de los pocos escogidos para ser interpelados en la Justicia.

Además, Punta Catalina (una termoeléctrica para quemar carbón) está bendecida por el Presidente pese a las tantas colas por pisarle y a pesar de que el mundo avanza hacia procesos menos dañinos al ambiente. Aquí tiene luz verde una infraestructura costosísima y altamente contaminante.

Para rematar, varios cercanos al mandatario han sido destituidos por hechos graves. Según tío José, son casos que han trascendido a los públicos, pues otros se mantienen calladitos a fuerza de billetes. Donni Santana, del Consejo Nacional de Fronteras está preso por presunta violación a su hijastra desde que ella tenía 12 años. Y en menos de 24 horas, bajaron del viceministerio de la Juventud a Van Troy Suazo por violencia intrafamiliar. El muy machito golpeaba a su esposa. Si falta algo, Marlin Martínez, exfuncionaria de Pasaportes está en prisión por el asesinato de la adolescente embarazada Emely Peguero. Y así seguimos contando piedras en los ®caros, muy caros® zapatos del Presidente oriundo de Arroyo Cano.