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Hábito

¡La lectura abre puertas!

Esencial. “El hábito de leer debe empezar en el hogar y luego las escuelas se convierten en el espacio para complementar y reforzar. Hay que entender que si papá o mamá no leen y regalan libros a los hijos e hijas, los infantes no podrán tener un efectivo resultado en hacer de la lectura una costumbre ”, refiere Míriam Valdez.

Esencial. “El hábito de leer debe empezar en el hogar y luego las escuelas se convierten en el espacio para complementar y reforzar. Hay que entender que si papá o mamá no leen y regalan libros a los hijos e hijas, los infantes no podrán tener un efectivo resultado en hacer de la lectura una costumbre ”, refiere Míriam Valdez.

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Kiara Jiménez / Especial para El NorteSantiago

Aquellos tiempos en los que deleitarse con un buen libro era un placer, acompañarlo con una taza de té o café era el complemento perfecto; tocarlo, olerlo y quedarse dormido con él contextualizaban una profunda intimidad entre la obra leída y el lector.

Resulta difícil pensar que esos momentos se han transformado, o en el peor de los casos desaparecido. Leer es un hábito que se construye y se fomenta día a día, sin embargo, en la sociedad postmoderna el interés por la lectura ha decaído.

Keila González, creadora del Club de Lectura Bien-Etre, menciona que leer no es un hábito social porque a las personas no se les enseña la importancia de la lectura y sus beneficios.

Un reflejo de esta situación es la escasa cantidad de clubes o círculos de lectura existentes. La profesora Míriam Valdez, quien imparte docencia de Expresión Oral y Escrita en PUCMM, señala que la ausencia de clubes de lectura es uno más de los síntomas de la deficiencia en la educación del pueblo dominicano.

Asimismo, el presidente de la Fundación Alianza Sociedad Cultural Cibaeña, Gregorio Amado Padrón Germosén, destaca que no existen suficientes salones de lectura por la falta de vocación cultural en los jóvenes. Considera que son muy escasos los lectores jóvenes, y que estos realizan la práctica por imposición, no por interés.

Esta es una problemática que afecta el desarrollo intelectual de la sociedad. No obstante, para corregirla es importante cuestionarse ¿Dónde quedaron aquellos días en que la lectura formaba parte de la cotidianidad y se nutrían los valores? ¿Por qué las personas no aprovechan las ventajas de la lectura? ¿Acaso no las conocen? La maestra Valdez sostiene que leer abre un mundo inmenso de posibilidades, por lo que destaca las siguientes ventajas:

Permite vivir en mundos inimaginables. Es una forma de viajar a lugares que en la realidad serían imposibles de visitar.

Se adquiere un estilo propio al momento de expresar ideas de forma oral y escrita. Se amplía el vocabulario. “Nos convertimos en expertos de diversos temas, lo que nos hace buenos para sostener cualquier tipo de conversación en cualquier ambiente ya sea laboral, profesional o simplemente en la cotidianidad”, resalta Míriam Valdez .

La lectura proporciona una escritura sin errores, lo que popularmente se llama “buena ortografía”.

En ese mismo orden, Keila González expresa que leer hace a la persona más cultos, ayuda a hablar y a escribir mejor; permite viajar sin tomar un avión o un tren, incentiva la imaginación y creatividad; y ayuda a entrar en diferentes niveles sociales, por el hecho de ser una persona más culta que el promedio.

Pedro Germosén entiende que el Estado debe crear políticas públicas y sociales que motiven e incentiven a las personas a leer. “Por ejemplo, construir más bibliotecas públicas, realizar concursos de lectura y hacer campañas de concientización ”, exhorta.

Clave. Una actividad que construye un futuro de oportunidades.

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