¡Tiempo para las vacaciones!

Hay un momento en que el cuerpo y la mente se combinan para pedir un respiro. Por eso, existe en el año un tiempo propicio para el descanso, llamado vacaciones, y el verano es la época por excelencia para ese espacio.

Los infantes salen de vacaciones escolares y es ahí cuando los padres y madres deben aprovechar las horas para convertirlas en tiempo de calidad. Según la maestra de nivel básico, Yudelky Leonsa, las vacaciones suelen ser un problema para quienes no tienen una programación de actividades listas porque es un tiempo distinto al habitual el que debe manejarse.

Leonsa recomienda que se arme una agenda balanceada para hacer de los minutos algo divertido y productivo para toda la familia, poniendo la atención principal en los infantes de la casa. Propone que se elaboren metas que sean recompensadas al lograr el objetivo, y realizar actividades lúdicas como el rompe cabezas, los juego de mesas y el tesoro perdido.

Una necesidad A pesar de las altas temperaturas del verano, las vacaciones escolares son una forma de recuperar la energía para iniciar el próximo período escolar con pilas renovadas, asegura la psicóloga Yesmilka Caraballo.

La especialista de la conducta entiende que los procesos educativos pueden producir fatiga y llegar a traducirse en bajo rendimiento, desmotivación, dificultad de atención, concentración y memoria. De manera que esos factores psicológicos afectan al estado físico y dan lugar a que al final del período académico el entorno escolar se torne difícil.

Otros recursos La maestra Leonsa dice que todo lo programado debe ajustarse al presupuesto familiar. Asegura que una buena opción son los campamentos temáticos, las clases deportivas y de arte, modelaje, cursos culinarios, natación; todo basado en el gusto del infante.

Fomentar el dialogo familiar es otra de las actividades que se pueden emplear.También ver los programas televisivos favoritos en familia.

Caraballo agrega que se deben promover actividades al aire libre como: una caminata, andar en bicicleta, visitar un parque y salir a conocer sitios. Además, exhorta a los progenitores que mantengan en sus hijos e hijas el amor por la lectura, escogiendo un libro para su edad y luego compartir el mensaje.

Lo mejor en todo caso, es brindar a los niños el mayor tiempo de calidad posible para forjar una alianza emocional que proporcionará bienestar en su desarrollo como ser humano, expresa Caraballo.

Una historia particular Eduardo José Raposo Liranzo, de 7 años, cuenta que en sus vacaciones en su familia se van de viaje, disfrutan, juegan, aprenden, se divierten y los niños descansan del trabajo de la escuela.

Comenta el niño Raposo Liranzo que desde que llega el día de las vacaciones en su familia hablan sobre lo que se quiere hacer. “Lo primero es ahorrar dinero para poder hacer las cosas que nos gustarían y segundo anotar en una lista los deseos que luego se van tachando cuando la realizamos”, asegura.

Para el pequeño las vacaciones son magníficas porque puede disfrutar mucho con la familia y conocer nuevos amigos en los sitios que van.† También porque descansa, ve películas y tiene más tiempo para usar sus juguetes.