Santo Domingo 23°C/26°C thunderstorm with rain

Suscribete

A TIRO DE HIT

El fenómeno Ohtani trae recuerdos de la Fernandomanía

Los Medias Rojas de Boston nos recordaron el pasado martes que Shohei Ohtani es, al fin y al cabo, humano. Consumiendo turnos de calidad y aprovechando el pobre comando que tuvo el japonés de sus lanzamientos rompientes, pudieron sacarlo del box luego de dos laboriosas entradas. Ohtani se vio limitado por una ampolla que lo estuvo afectando desde el inicio del partido, de acuerdo a su manager Mike Scioscia.

Independiente de ese resultado de su última apertura, el potencial que ha demostrado el joven jugador es tremendo. ¿Dónde se puede encontrar un lanzador que mantenga su bola rápida entre 97 y 100 mph, que muestre una velocidad de salida en sus batazos que compite con los grandes toleteros del negocio, y que puede correr de home a primera base con una velocidad comparable a la de su compañero Mike Trout? Con esa combinación de habilidades, podemos decir que estamos en presencia del jugador más excitante del momento.

Ohtani y el recuerdo de Valenzuela

Por lo menos en Anaheim, la anticipación con las participaciones de Ohtani es tal que nos hizo recordar los meses de abril y mayo de 1981 cuando el zurdo mexicano Fernando Valenzuela se convirtió en la gran sensación del béisbol lanzando para los Dodgers de los Angeles.

Valenzuela había presentado credenciales como relevista en la recta final de la temporada de 1980, trabajando 17.2 entradas sin permitir carreras limpias en plena lucha divisional con apenas 19 años de edad.

El jovencito lució prácticamente inmune a la presión de ese momento, posiblemente por su experiencia previa compitiendo en México antes de ser descubierto por el scout Mike Brito y adquirido por los Dodgers, que pagaron unos US$120,000 a los Leones de Yucatán por sus derechos.

En 1981, el estelar de los Dodgers Jerry Reuss se lastimó poco antes del inicio de la temporada, obligando al dirigente Tom LaSorda a apelar al zurdo mexicano para enfrentar a los Astros de Houston el día inaugural. Marquemos ese día como el inicio del fenómeno que se conoció como la “Fernandomanía”.

Valenzuela lanzó blanqueada de cinco hits contra Houston en Dodger Stadium, llevando a su equipo ganar el primer partido de la temporada con score de 2-0. Allí inició un período de ocho aperturas que es material para la historia.

En su segunda presentación, dominó a los Gigantes de San Francisco en el Candlestick Park, tirando partido completo de cuatro hits y una carrera con 10 ponches en una victoria 7-1.

El mexicano retomó la ruta de las blanqueadas en su siguiente salida, dejando en cinco hits a los Padres de San Diego en el Jack Murphy Stadium, con 10 ponches sin boletos. El encuentro concluyó 2-0.

El dominio continuó en el Astrodome de Houston el 22 de abril de 1981: “Nueve ceros” de siete hits con once ponches para vencer en un duelo al ex-Dodger Don Sutton en un partido que terminó 1-0.

Valenzuela lanzó una tercera blanqueada consecutiva y cuarta en sus primeras cinco apariciones cuando espació siete sencillos frente a los Gigantes de San Francisco en un triunfo 5-0.

Su primera salida de Mayo fue en el Olympic Stadium de Montreal, y allí dejó en cinco hits y una carrera a los Expos de Tim Raines, Andre Dawson, Gary Carter y otros. El “Toro” ponchó siete bateadores sin boletos en una victoria de los Dodgers 6-1.

La racha continuó cinco días después en el Shea Stadium con una blanqueada 1-0 sobre los Mets de Nueva York, en un partido donde Valenzuela ponchó 11 bateadores.

Más sobre Valenzuela

El 14 de mayo, en su octava apertura, por primera vez permitió más de una carrera, pero siguió dominando. Lanzó pelota de tres hits y dos carreras en un segundo enfrentamiento contra los Expos en un partido que terminó 3-2, definido por un cuadrangular del dominicano Pedro Guerrero.

Si pasamos balance a esas primeras ocho apariciones, Valenzuela las ganó todas con siete juegos completos, cinco blanqueadas y cuatro carreras limpias permitidas en 72 entradas de trabajo para un increíble promedio de carreras limpias de 0.50. Un fenómeno había nacido.

Su actuación en el resto de aquella temporada acortada por una huelga de jugadores no se acercó a lo que hizo en esas primeras ocho salidas, presentando record de 5-7, 3.66 el resto del camino. No obstante, gracias al increíble inicio, el nativo de Navojoa se convirtió en el primer lanzador en la historia que logró los premios de Novato del Año y Cy Young en la misma temporada. Fue líder de la liga en juegos iniciados, juegos completos, blanqueadas, entradas lanzadas y ponches y segundo en victorias.

Luego de ser determinante para llevar a los Dodgers a la Serie Mundial, pudo crecerse en un vital tercer partido del clásico para vencer a los Yankees 5-4. En ese momento, los Dodgers estaban debajo 0-2 en la serie y Valenzuela lanzó juego completo con 147 lanzamientos, superando a un difícil rival a pesar de no tener su mejor “stuff” ese día.

El equipo de Los Angeles ganó los siguientes tres desafíos para coronarse campeón, y el mexicano agregó un anillo de Serie Mundial a los logros de una temporada inolvidable.

Tags relacionados