TRILOGÍA
Jesús alimentaba sus gallinas al momento de su deceso
Hermanos. Ramón, Pedro y Jesús los tres actuaron con el equipo Dukes y fueron exaltados a la inmortalidad de la fama con este conjunto.
El ex lanzador Jesús Martínez tenía en agenda vacacionar desde este jueves para Samaná, con esposa e hijos, con motivo de la Semana Santa.Sin embargo encontró la muerte de manera fulminante en momentos en que con alegría alimentaba a sus gallinas en la parte trasera de su negocio, Martínez Cars Sale.
Los equipajes estaban casi preparados, el vehículo en perfectas condiciones, pero su corazón recibió el martes los impactos de un ataque que lo estremeció y le hizo caer a los pocos minutos de recibirlo, siendo tan fuerte que no hubo tiempo para preservar una vida que con solo 44 años hoy descansa en los brazos de Dios.
Jesús era el menor de la trilogía de lanzadores que conformó junto al Inmortal Pedro Martínez y Ramón, quien arribó al país ayer a los pocos minutos de que el féretro partiera al cementerio Cristo Redentor donde entre llantos una extensa hilera de vehículos comenzaba el recorrido donde su esposa, hijos, madre, demás familiares y amigos le dieron el último adiós.
Su madre, Leopoldina Martinez lloraba sin cesar la pérdida de su vástago, quien en esta parte de la vida era quien “mas apegado a ella estaba y le daba vuelta” en su natal Hato Mayor, ya que Pedro cuenta con innumerables compromisos, principalmente con los Medias Rojas de Boston, Ramón es instructor de pitcheo con los Orioles de Baltimore y su otra hija, Ana Delia, reside en la Florida junto con su esposo, el también ex monticulista Juan Guzmán.
“Nos veremos allá en el cielo, te nos fuiste hermano y te extrañaremos mucho”, fueron unas palabras de despedida que le dedicó Pedro Martínez a Jesús, el de menor edad de los hijos de Leopoldina. El inmortal de Cooperstown cuenta con otros hermanos de padre, Nelson y Luz María.
Jesús, a quien le había dado un pre infarto hace unas tres semanas, ya se encontraba mucho mejor, e incluso caminaba en el parque Mirador del Sur, pero la muerte le sorprendió.
“Estábamos programados para viajar juntos a Samaná con motivo de la Semana Santa”, dijo a Listín Diario Efraim Lugo, un ex empleado de este rotativo, quien mantenía una estrecha relación de amistad con el extinto lanzador con quien frecuentemente intercambiaba mensajes de whatsapp y llamadas telefónicas.
Su esposa, Yasmín Corcino lloraba desconsoladamente la pérdida de su compañero, así como sus tres hijos, Jayson (14 años), Jostin (10) y Joshua (8) no podían creer que su progenitor ya no se encontraba con ellos.
“Era un gran trabajador y una persona con un corazón más que bondadoso, siempre estaba presto a ayudar al prójimo, estaba pendiente de todos, la unidad familiar era uno de sus principales norte”, señala Juan Guzmán, ex lanzador, quien brilló con los Azulejos de Toronto y quien está casado con Ana Delia, hermana del extinto monticulista.
Desde que comenzó el velatorio en la Funeraria Blandino de la avenida Abraham Lincoln comenzaron a desfilar un nutrido grupo de ex peloteros para acompañar a la familia Jaime Martínez en su lamentable momento.
Entre estos se encuentran los también inmortales de Cooperstown, Juan Marichal y Vladimir Guerrero, así como David Ortiz, José Mesa, Pedro Julio Astacio, Neifi Pérez, José Offerman, Wilton Guerrero, Sil Campusano, Domingo Martínez, el director de scouts de los Padres de San Diego Feliz Félix, Eleodoro Arias, quien fue un gran mentor para los hermanos Martínez entre otros.
“Conocí a Jesús cuando entrenaba con los Dodgers en los ocho meses que estuve allí, desde ahí inició nuestra relación, la cual se fortaleció con toda la familia cuando mi compadre Pedro y yo estuvimos juntos en Montreal y desde entonces me siento parte de ellos”, señaló Guerrero.
“Es lamentable su deceso, compartimos mucho en el Campo Las Palmas y luego en las Menores con los Dodgers”, expresó Offerman.
