Respuesta inmediata
El presidente Danilo Medina ha podido constatar, in situ, los daños causados por el huracán María en cinco provincias del país y ha prometido respuestas concretas e inmediatas para remediarlos.
Ha encontrado un panorama de zonas inundadas y enlodadas, viviendas destruidas o maltrechas, damnificados que perdieron sus enseres y vías obstaculizadas por desprendimiento de asfalto, caída de árboles o escombros.
Un desastre que exige acción rápida para restablecer la dinámica de vida de esas poblaciones, para mitigar las carencias de los damnificados y para reubicarlos en casas que el Presidente ordenará construir en terrenos menos vulnerables.
El dinero para esta obra imperativa de reconstrucción se buscará donde sea, según dijo anoche el ministro administrativo de la Presidencia, José Ramón Peralta, tras una reunión de evaluación del viaje del presidente Medina por las zonas devastadas.
Tantas zonas de calamidad clamando al mismo tiempo por la asistencia oficial hacen aconsejable crear un Comité de Reconstrucción, como ya lo propusimos editorialmente, para que capitalice toda la logística de acción, sin dispersiones de esfuerzos ni tiempo.
Este comité puede reunir a los titulares o representantes de las instituciones más comprometidas con la reconstrucción, trazar el cronograma de trabajo, darle seguimiento a las tareas, mantener el enlace directo con las comunidades afectadas, ejecutar el presupuesto e informar semanalmente al Presidente del avance de los trabajos.
Es un mecanismo que ayuda a dar a cada zona lo que necesite, en función del nivel de sus daños, para que no haya rezagos ni trabas innecesarias en las tareas de reconstrucción, que es lo que suele pasar una o dos semanas después que una tragedia ha pasado.
Al principio se vuelcan las primeras ayudas o las promesas de asistencia, pero con el tiempo disminuye la atención o el sentido de la prioridad y hasta se quedan sin cumplir algunas obras fundamentales. Esto es lo que debe evitar el Gobierno que ocurra.
En manos de un Comité de Reconstrucción, ese riesgo puede darse por descontado.