Santo Domingo 28°C/28°C few clouds

Suscribete

La pared transparente de María de los Milagros Pérez Toro

Avatar del Listín Diario
Juan Martínez LuqueSanto Domingo

La poesía de María de los Milagros, es una oda a sus vivencias de antaño. Una ventana abierta al recuerdo de un pasado abundante en experiencias, que a través de su pluma, quiere levantarse contra un presente en crisis, con valores restringidos, y envuelto en precariedades.

Este poemario, suscita interés y al mismo tiempo invita a una reflexión que se esconde entre las guaridas de sus frases, siempre con mensajes ocurrentes, que aparecen espontáneamente sorprendiendo al lector e invitándole de nuevo a releer el texto.

Es curiosa su forma poética de describir momentos delicados donde se juega con la vida y la muerte, es decir, contemplaciones escritas con la furia de un desencadenado momento que acapara al mismo tiempo; - el furioso “atroz” y la vanidosa “bondad”-. Ejemplo en su poema el 30 de Octubre del 1950. María de los Milagros, vacía sus calles y describe en el infinito espacio de la inhumana guerra, un soldado que observa aquella jovenzuela de cuerpo esbelto y mirada inocente, jugando con el mundo de la esperanza, mientras olvida la ametralladora que reposa junto a él, apuntando a la otra esquina de la calle.

Es una poetisa que se deja inspirar por el cántico suave de las palabras, cuando se duerme entonando un himno al tiempo y a sus componentes; el Sol, la luz, la noche y el día. Creo que no hay elegía más interesante que aquella que invita al lector a acariciar delicadamente cada estrofa porque el contenido es misterioso y profundo. (Y se durmió cantándole)

Pero debemos preguntarnos si nuestra poetisa no está quizás, en momentos de melancolía extremos porque en su interior esconde inquietudes que relacionan la vida y la muerte como un paralelismo que surge en medio de visiones y que según ella: “solo el alma lo sabe”. (Cómo).

Me parece sentir la misma nube lúcida que desvela el alma de su inquietante sueño, y que reposa en el mismo lugar pero en instantes diferentes porque ella es sentimental, expresa reconcomios de una gran sensibilidad que esconde en cada rincón de su pluma y que se atreve a escribir cuando la plenitud de su momento lisonjea la espontanea inspiración que refleja en su poemario. Poemas para los que, como ella, quieren resaltar la naturaleza en medio de plumas gigantes con raíces, donde un pájaro en la rama del flamboyán, escribe en el dialecto rojo y trae a su memoria un siglo de veranos. (Expreso al Suroeste)

Me dejo llevar por su impulso que estimula esa ilustración que le comunica con el mundo, a través de un poemario sincero, cargado con ese fuego fatuo, de luz breve y pensamiento visceral, donde la opacidad de una página, la ceniza y la sangre juegan al escondite con frases talentosas y mensajes ocultos. Así reviví ese recado que se oculta en su 23 de septiembre del 2005.

María de los Milagros, es una poetisa noble, que cuida su grafía con elegancia, aunque todavía tiene campo para impulsar más lejos aún su inspiración poética, porque como en el “invierno con sol”, siente fluir hacia la primavera esa larga llamada que debería ser el reflejo de una obra plena, cargada de flama armoniosa y audaz.

Tags relacionados