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ENTREVISTA

Leer en Santiago: Requisito para escribir

Cuatro integrantes del taller de narradores de Santiago declaran sus fantasmas y deudas en favor del saber. Para ellos es imprescindible entender que la lectura es el acto mayor en favor de la inteligencia humana

Lectura. No solo forma escritores sino hombres y mujeres cultos, preparados para enfrentar los retos de la posmodernidad.

Lectura. No solo forma escritores sino hombres y mujeres cultos, preparados para enfrentar los retos de la posmodernidad.

La primera condición del escritor, según lo conversado, es leer. Y leer buena literatura, coincidieron los escritores convocados a la sala de lecturas de Casa de arte una tarde de sábado. Marlon Anzelotti, Ubaldo Rosario, Sandra Tavárez y Arlyn Abréu escriben. Y del mismo modo, o incluso más, leen.

Escritores jóvenes de Santiago, los tres primeros pertenecen al Taller de Narradores de Santiago. Abréu, al Taller Literario del Centro de la Cultura. Comparten la ciudad cibaeña, espacios de expresión pública y cierto momento histórico en que afrontaron el quehacer literario en serio. Todos han sido publicados en sus géneros de creación.

Papel vs digital

La generación actual consume muchas horas en visualizar pantallas. Las páginas se consumen junto con la batería de los aparatos digitales. Los nacidos en el siglo XX aún se aferran al papel impreso, el olor, la textura, el cuidado de la impresión.

Arlyn Abréu, además de haber modificado sus preferencias temáticas de lectura, ha migrado desde el papel a los formatos digitales. No obstante, sus libros favoritos los consume en ambos soportes. “Autobiografía de un yogui”, “La Matriz de la ilusión”, entre otros textos místicos y filosóficos ocupan su tiempo para leer. “El ser humano es selectivo”, explica la joven.

Por las manos del ensayista Marlon Anzelotti pasa de todo. No obstante, tiene sus escritores favoritos, como Mario Vargas Llosa y Milan Kundera. “Para escribir tiene que haber un proceso de lectura intensa”, afirma Anzelotti, quien suele comprar sus libros en librerías o por internet, rara vez pisa bibliotecas para estos fines. La lectura digital aún le cuesta, aunque no se separa de su móvil.

El caso de Sandra Tavárez confirma la premisa inicial. Su entrada al Taller de Narradores se da motivada por la lectura. Luego, vino la conversión a narradora. Lee mucha ficción para desconectar de la realidad que vive. Confiesa además que suele dar vueltas sobre sus favoritos Carlos Fuentes y Milan Kundera, entre otros. En los últimos días, ha estudiado las novelas de Juan Bosch: sus cuentos los devoró todos hace ya buen tiempo. Su condición políglota y los viajes de trabajo la han impulsado en los últimos meses a leer literatura caribeña, en los idiomas originales.

El abogado Ubaldo Rosario camufla un Kindle dentro de una vieja agenda con bordes dorados. Con este aparato hace sus lecturas, tanto personales como las que comparte con su hijo Ulises cada noche. En la actualidad lee al peruano Julio Manuel Ribeiro. De este resalta “Las palabras del mudo”. “Tiene unos temas muy únicos”, apunta. Esta originalidad temática es un requisito indispensable para él, tanto al momento de leer como para escribir sus propias obras.

Más allá de bestsellers y literatura light

Todos entienden que en la actualidad se lee más, tanto literatura como otros géneros. Aunque la calidad de lo que se lee sea cuestionable. Rosario, al igual que el resto del grupo, sostiene que “aunque sea ligera (la literatura) se está leyendo”.

Tavárez agrega que al final, si se está leyendo, es importante. Cita el caso de los bestsellers de finanzas personales, autoayudaÖ “La gente busca lo que necesita que entiende leer”, comenta la cuentista.

La mayoría coincide en que, este primer acercamiento a la lectura puede producir luego lectores más selectivos, con mayor criterio. Es Abréu quien se cuestiona si, al final, el lector de bestsellers pueda evolucionar hacia otros textos de mayor calidad o si la lectura no impacta a este lector. “Pueden leer esos títulos, pero percibo que su crecimiento como lector no se da”.

Sobre la mesa también se comentan otros libros de grandes ventas como “Cincuenta sombras de Grey”, la saga “Crepúsculo”, entre otros, que además llegan en formato audiovisual: el cine. Es aquí donde los entrevistados repasan el caso de clásicos de la literatura que su paso al cine tener efectos distintos entre escritores y lectores. La película suele motivar a la lectura del libro, y la experiencia con el papel resulta más gratificante.

El compromiso del escritor

Rosario extiende sus comentarios a su propio gremio, los escritores. “El gran error de los escritores dominicanos es que no salimos de los problemas domésticos”. El coordinador del Taller de Narradores insiste en que crear ficción es el gran reto para que la literatura trascienda el instante y sobreviva al curso de la historia.

“La buena literatura no ha tenido nunca un gran público”, insiste Ubaldo al cierre de la conversación, para luego añadir que el único compromiso del escritor es con la historia, no con los lectores.

Quién es quién

Arlyn Abréu es periodista, egresada de la UASD. En 2008 publicó el libro de cuentos “Jardines Urbanos”, junto a Carlos Núñez, compañero del Taller Literario del Centro. En Santiago nació y mantiene residencia. Sus textos han sido antologados en publicaciones nacionales.

Sandra Tavárez es miembro del Taller de Narradores de Santiago. Sus cuentos han obtenido premios y ocupan espacio en diversas antologías. Publicó en 2010 “Matemos a Laura y otros cuentos”. En 2012, gracias a la beca del Ministerio de Cultura, produjo el libro “Límite invisible”. Tavárez domina inglés, francés e italiano. Estudia portugués.

Ubaldo Rosario, es abogado y escritor oriundo de Santiago de los Caballeros. Es co-fundador del Taller de Narradores de Santiago. Sus cuentos aparecen en las antologías: Para matar la soledad y Este era el principio. Lo han galardonado en los concursos de cuentos de Radio Santa María y de Ministerio de Cultura. Tiene dos libros publicados: Cuentos cortos para lectores perezosos y Estudio jurídico, Contaminación por ruido.

Marlon Anzelotti escribe ensayos y es miembro del Taller de Narradores de Santiago, ciudad en la que nació y hace vida cultural intensamente. Con el texto “Aljaba de Mitos”, obtuvo el segundo lugar del Premio de Ensayo Pedro Francisco Bonó en los Premios Funglode/GFDD 2013.

Marlon Anzelotti: Soy omnívoro, puedo leer lo que me cruza en las manos. Voy atrás, hacia adelante, los clásicos...

Ubaldo Rosario: El único compromiso del escritor es consigo mismo, con la historia, no con los lectores.

Sandra Tavárez: Estoy empezando a leer autores caribeños, para comprender mejor el espacio en que me muevo, que compartimos.

Arlyn Abréu: No concibo la idea de que la gente lea y esa lectura no lo transforme, se quede ahí.

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