Evolución

Hay momentos en que nos urge un cambio. Estás inconforme con la vida emocional, fi nanciera o de salud. Una de las razones por las cuales no hacemos las transformaciones requeridas es porque nos encontramos en un punto ciego. Otros ven lo que nosotros no podemos. Hay tanto ruido en la cabeza con la información que se tiene y la convicción propia no permiten escuchar lo que el otros tiene que decir, inclusive hace difícil el trabajo terapéutico. A través del tiempo vamos acopiando ideas, proyectos, vamos aprendiendo de las fi guras parentales o el medio en que nos rodeamos. Si queremos una evolución necesitamos vaciar nuestra taza, es esencial desocupar nuestras mentes para que podamos ponderar nuevas ideas. Encontrar quien apoye en el proceso es fundamental. Cuando pretendemos eliminar patrones de conductas arraigadas que ya no sirven más en nuestro subconsciente y están caducados requerimos una fuerza especial, voluntad y orientación para no sucumbir en el intento.