TESTIGO DEL TIEMPO

Evolución de la deshonestidad

Tan deshonesto es enriquecerse apropiándose del dinero que nos corresponde a todos, como reclamar para una sola persona, todo el crédito de un esfuerzo de la nación. Desde los 12 años del gobierno de Joaquín Balaguer iniciamos el desarrollo de nuestra infraestrfuctura turística, en ese momento, al turismo le llamaban una “industria sin chiminea”.

Fue Balaguer quien creó en el Banco Central el departamento de Desarrollo de la Infraestructura Turística (INFRATUR). Ahí construyeron Eurohotel, Playa Dorada y todo el polo turístico de Puerto Plata.

Salvador Jorge Blanco apoyó financieramente al Grupo Rainieri para desarrollar el turismo de Punta Cana, luego de que el Club Med se marchara del país. Los gobiernos de Leonel Fernández y Danilo Medina invirtieron mucho dinero, trabajo e incentivos para levantar el turismo. 

De hecho, fue Medina, ante la Asamblea Nacional, quien se planteó atraer 10 millones de turistas como una meta nacional, el gobierno alega haber alcanzado ese logro.

Y lo promueve como si antes del 2020 en el país no había ninguna infraestructura ni promoción turística. Es incierto que los turistas, llegaron porque un ministro "bonitillo" visitara ciudades estadounidenses y europeas con dos bultos de mano, bien caros, para “promover el turismo”.

Robarle el crédito a todos los gobiernos y al pueblo dominicano que han invertido esfuerzos en levantar la industria turística, es tan deshonesto como robar dinero público. El Desarrollo del turismo es un crédito público. Este gobierno encontró toda la infraestructura y la promoción turística funcionando, robarse el crédito colectivo es una deshonestidad que invita a cuestionar la veracidad de las estadísticas.

En esos 10 millones incluyen tres millones de dominicanos del exterior que visita su país cada año. Quedan siete millones, incluidos los que llegan en cruceros, algunos bajan a dar una vuelta por el pueblo, otros se quedan en el barco, pero son contabilizados.

Tan ladrón es quien roba dinero, como quien roba crédito, un gobierno “honesto y transparente” reconocería el crecimiento del turismo como un logro nacional, no de los “popis bonitillos”.

Tags relacionados