Santo Domingo 23°C/26°C thunderstorm with rain

Suscribete

FUERA DE CÁMARA

Un “colirio ético”

Aurelio Guerrero es hijo digno de su padre... Y su padre fue uno de los hombres más correctos que traté por muchísimos años siendo él peluquero renombrado de la calle Sánchez, en Ciudad Nueva, y yo uno de sus clientes favoritos cuando tenía cabello qué recortar.

Mozura, como le llamaba todo el mundo, inspiraba respeto y disciplina hasta por su porte siempre pulcro y elegante, su trato correcto y su dicción perfecta, con camisa blanca y corbata, y en su habitual modo de trabajar tratando de usted a todos sus clientes, así llevara años conociéndolo y recortándolo.

Uno de sus hijos sobresalía por su sobriedad, Aurelio, el mayor, y otro, Laureano, por su sociabilidad con el resto de los muchachos del barrio. Desde muy joven Aurelio se dedicó a la rama del seguro; Laureano, al estudio de periodismo en la UASD, y por eso mis relaciones con él fueron mucho más fluidas que con Aurelio porque para entonces me iniciaba en los ajetreos de los diarios.

Aurelio, como Laureano, es dirigente fundador del PLD, un doctrinario formado por Bosch y muy querido por todos los peledeistas de aquellos años. Lo que nadie se explica es por qué un dirigente como él está fuera del gobierno... Como lo plantea una vieja compañera de su partido, Esperanza Aguirre, el nombre de guerra de una reconocida dirigente del PLD. Miren lo que dice.

... Una alta valoración “Hola, César. Leí con agrado tu columna del pasado jueves en donde haces justicia a las cualidades de mi amigo de siempre, Aurelio Guerrero. No me sorprende, ese es Aurelio: conciliador, pacifista, amigo, compañero, buen esposo, padre, hijo y hermano ejemplar. ¿Y qué decir de su invaluable condición de político, destacándose siempre como hombre que suma y que busca el mejor de los arreglos antes que un mal pleito?

“Es una pena, César, que hombres como Aurelio, verdadero peledeista disciplinado, auténtico, frugal, no ocupe una posición en el gobierno del Presidente Medina. Sería un verdadero colirio ético y moral sobre todo en estos momentos tan convulsos en que se encuentra nuestro país político.

“Como siempre, recibe mi abrazo afectuoso: Isabel Aguirre”.

Y entonces... Aurelio “Apreciado César: El problema de la Judicatura no es sencillo, son muchos los entuertos. Aún cuando eventualmente se encabrite un caso por encima de los demás; entre reenvíos interminables, fallos tardíos y decisiones insólitas de algunos jueces, se tiene un cuadro horroroso de una franca denegación de justicia.

“Un expediente con numerosos imputados, cada uno con derecho a por lo menos un abogado, en que las incidencias y reclamos de uno no vinculan a los demás, puede conducir a una interminable hilera de posposiciones como lo estamos viendo con el caso del ex regidor acusado de sicariato. Y del taponamiento en los casos pendientes de fallo, ni se hable. Ya no es asunto de días o meses, se trata de que están tardando años. Goteras de nuestro Código Procesal Penal.

“De las decisiones insólitas de algunos jueces, vale la pena citar el caso de la persona que estafó al Estado con la venta de un solar. Curiosamente timó al Estado, garante y responsable de certificar la autenticidad titular del país. Goza ya de libertad la súper ladina autora, usando el subterfugio del quebrantamiento de salud.

“Pero... y de los Ingenieros que estaban construyendo dentro, ejecutando un contrato para la edificación del liceo obtenido mediante el primer sorteo público celebrado en el 2012... ¿Quien se acuerda de ellos? Nadie. Ni Educación, ni Obras Públicas, nadie... Andan por ahí como almas en pena, agonizando entre deudas, desprotección y olvido...

“Recibe mi saludo e invariable afecto, Aurelio”.

Tags relacionados