La fiscal rebelde

Un incidente entre dos agentes de la autoridad pone en el candelero el tema del transporte y el tránsito. El enfrentamiento entre una dama que es fiscal y un agente de AMET ha polarizado las opiniones. En lo que se averigua, dispusieron el arresto del policía.

El alegato de la dama de haber sido víctima de una trompada atrajo todas las miradas y comentarios, pero la dirección de AMET afirma que los hechos no son fieles a la declaratoria de la fiscal. Este incidente debe ser desmontado. Ir a la causa para llegar a los efectos. La fiscal Surelis Jáquez, y se puede ver en el video grabado por el agente Richardson Sabá Núñez, en ningún momento actuó como agente de la autoridad. Mostró rebeldía a la entrega de sus documentos, contrario a lo que indican los procedimientos que ella debe conocer. Nadie está por encima de la ley.

Ella se aparcó ocupando toda la acera de un centro comercial a donde llegó para que le arreglaran el pelo. Eso motivó que fuera abordada por AMET. Ella desmintió, según el video, que se negara a entregar sus documentos porque era fiscal, pero el agente así lo repite varias veces. Es evidente que ella se identificó como autoridad porque el policía no es adivino.

Cumpliendo instrucciones superiores el agente Sabá Núñez iba registrando en video el curso de los acontecimientos y en un momento se ve un rápido movimiento del móvil del agente. Ella dice que fue agredida, que el AMET le propinó una trompada y éste dice que ella trató de quitarle el teléfono.

La fiscal es experta en interrogatorios y manejo con delincuentes. Conoce los procedimientos, pero no registró con un médico legista la agresión. La trompada de un hombre en la cabeza o el rostro no pasa inadvertido. Es la palabra de una dama contra el policía. Según declaraciones de la fiscal Jáquez, ella no miente porque es cristiana. La confesión religiosa es su escudo. Pero no explica las razones por las cuales se negó a identificarse ante el cortés requerimiento del AMET. La parte delgada es el policía. Para juzgar este caso no se puede apartar la vista de la causa. La fiscal se negó a mostrar sus documentos bajo el alegato de ser agente del ministerio público. La fiscal despide un tufo a prepotencia. Esto fue un choque entre autoridades.