El desbloqueo político en España
El Rey Felipe VI ha encargado al presidente en funciones Mariano Rajoy, la conformación de un nuevo gobierno tras la cuarta ronda de contactos del monarca con todos los grupos con representación parlamentaria.
Sin embargo esto de ninguna manera significa que el problema de bloqueo institucional y provisionalidad del presente gobierno esté resuelto, sino todo lo contrario. Ahora es que viene lo difícil.
Para que el lector que no conoce, pero que le interesa entender cómo funciona el tema político en España, lo primero que debe tener claro es que las elecciones no son para elegir presidente, sino las Cortes generales compuestas por un Senado de 266 curules y un Parlamento o Congreso de los Diputados con 350 miembros, siendo necesario 176 votos de esta última cámara legislativa para ganar con mayoría absoluta. De lo contrario como ha ocurrido, se precisa la negociación entre los grupos parlamentarios.
En el actual contexto y luego de una inédita repetición de las elecciones, el juego sigue trancado por la tozudez de algunos partidos en anteponer sus intereses a los del pueblo, el cual está hastiado y deseoso de pasar página.
En un sistema monárquico parlamentario como el español, a pesar de que los constituyentes de 1978 no previeron situaciones como la actual, no es menos cierto que hay herramientas para desbloquear institucionalmente el país, mediante tres tipos de acuerdos posibles, sin que ello signifique que un partido firmante traicione a sus votantes.
Esos acuerdos son en primer lugar el “Pacto de Investidura”. Este tipo de negociación permite por ejemplo a los partidos de oposición en las actuales circunstancias, facilitar la conformación de un gobierno en minorías mediante una abstención en segunda ronda de votación, tras el debate de investidura.
Otro acuerdo posible es el llamado “Pacto de Legislatura”. Este tipo de acuerdo igualmente permite en una situación como la actual, la formación de un ejecutivo de unidad programática donde los firmantes se comprometen en garantizar un gobierno estable, sin la necesidad de formar parte de ese nuevo gobierno. Una negociación como esta te permite perfectamente mantenerte en la oposición, pero vigilante del complimiento de lo pactado y en caso de no sentirte satisfecho, solo bastaría someter al presidente del gobierno a una moción de confianza que deberá superar, pues de lo contrario, elecciones anticipadas.
Y por último está el “Pacto de Gobierno” que sería en resumen una conjugación de los dos anteriores, con la conformación de un gobierno compartido y de unidad programática. El meollo de este tipo de acuerdo, es que pueda llevarte a perder base en tu propio partido al entrar en el gobierno y con cuales responsabilidades.
Como se puede apreciar el desbloqueo de la situación política en España no es tan difícil de superar y ahí la razón del enfado de la población, de los empresarios y los principales agentes sociales, de no comprender las posiciones encontradas de los líderes de los cuatro partidos con mayor representación parlamentaria (PP; PSOE; C’s y PODEMOS).
El rey según su declaraciones vertidas por su padre, Juan Carlos está bastante preocupado por la crisis política que sin dudas ha hecho daño a la marca España en el mundo y ha afecto al mercado bursátil IBEX-35.
Por ello podemos concluir afirmando que la crisis más que política, es de responsabilidad, ya que los distintos líderes continúan trazando líneas rojas e ignorando el cansancio de la ciudadanía y la paciencia del propio monarca.