Cuando somos un obstáculo

¡Hola, buenos días! Con la gracia divina de nuestro salvador nos reencontramos esta semana. Hace unos días me detuve a pasar balance sobre los primeros 30 días del 2016, entendí que era justo el momento de evaluarme, saber cómo iba mi plan de acción hacia mis metas, escritas y visibles para todo el año. ¡Oh sorpresa! Había cumplido al pie de la letra en el área profesional. Satisfecha sonrío, sin embargo, no todo es color de rosas en otros puntos importantes... ¡Claro! Eso siempre pasa, nos aferramos en metas específicas y olvidamos otras. Debía ser consciente y enfrentar mis debilidades en zonas trascendentales dentro de mí como ser humano y en mi accionar diario, pues esas áreas las había marcado con la expectativa de obtener un porcentaje importante dentro de nivel de mis logros. Sin embargo, hacerme una autocrítica me llevó a darme cuenta que quizás yo era mi mayor obstáculo para progresar en plazas características de donde me desarrollo y hacia donde quiero llegarÖ Había dado los pasos que nos explican y nos motivan los grandes pensadores, estaban definidas mis metas, sé a dónde quiero enfocar mi vida, sin embargo me di cuenta que sabiendo que he logrado cosas más difíciles no me he dado el permiso aún para lograr otros objetivos de igual jerarquía y quizás con las mismas peculiaridadesÖ Satisfacción personal, poca disposición o cualquier excusa he encontrado para postergar o simplemente me justifico en falta de tiempo, imprevistos o cansancio. Parece fácil, pero al final, puede ser complicado, pues entramos en un trance de comodidad que al pasar balance puede costarnos mucho emocionalmente. Sin embargo, descubrí que es como en la salud, si tratas el mal con tiempo podrás obtener mejores resultados en la cura y así es como decidí poner manos a la obra, porque de no hacerlo, mis expectativas sobre mi misma podrían afectarme en todos los planes que tengo para este añoÖ Como yo habrán decenas de personas a las que se les hace difícil tomar el control de algunas áreas de su vida, sin embargo, el autoanálisis debe arrojar los focos de atención donde debemos reforzarnos y estar listos para pisar el acelerador del carro de nuestra vida y disfrutar el trayecto del mismo, sin ponernos limites, es cuestión de actitud y visión lo que nos permitirá llegar a donde queremos. No te juzgues, ni te conviertas en el mayor obstáculo de tu vida, porque esto solo te separará de tus sueños. Es un derecho ir por lo que realmente quieres, no un lujo. ¡Hasta la próxima!