Los acuerdos de paz en Colombia
No obstante que el ELN la no participa de los acuerdos de paz, en Colombia se espera una jornada electoral calmada el 2de octubre, en unas 81,000 mesas electorales, con 500 mil jurados, observadores de 64 países; mañana se firman los acuerdos en Cartagena que permitirán esa cita histórica que fue convocada el 29 de agosto pasado luego de la firma de los acuerdos de La Habana: las posibilidades de fraude son mínimas, dada la sencillez del proceso, solo se votará sí o no.
El Sí deberá superar el 13% de los electores inscritos en el padrón, unos 4,536,992 votos, si no pasa ese umbral, los acuerdos no son válidos; tampoco son validos si el No, obtiene más votos. Podrán votar todos los empadronados incluidos los colombianos residentes en el exterior y los “guerrilleros que lograron cedularse o que ya lo estaban”: En La Habana se cedularon los primeros 40.
Los puntos de discusión en que se ha centrado la campaña para el plebiscito del Sí y del No, son básicamente los siguientes: 1) los principales líderes de las FARC, responsables de delitos atroces, no irán a prisión, ni un día. 2) Habilitados de sus derechos políticos pueden ser candidatos y ser elegidos. 3) El narcotráfico pasa a ser un delito consecuencia del conflicto, como medio de financiación.
4) No entregan el dinero acumulado, ni reparan las víctimas y, 5) La Justicia es reemplazada, al margen de la Carta Política, para atender el acuerdo con las FARC.
En contra de ellos, enarbolados por el No, se pude indicar que la impunidad es consustancial con los acuerdos de paz, es una realidad triste que representa un punto innegociable para los culpables que están en la mesa, en realidad se trata de un perdón: Si el Secretariado de las FARC hubiese pudiese haber ido a la cárcel, seguiría la guerra. Esta sin embargo, dado el estatuto de Roma, no incluye los delitos de lesa humanidad, por ello, conforme a los parámetros de la Corte Penal Internacional, deberán confesar al menos uno. Lo malo es que mientras purgan la condena, simbólica, podrán ser candidatos y, como otros ex guerrilleros, antes que ellos, que han sido legisladores y alcaldes, podrán optar por dichas posiciones: Los colombianos decidirán entonces si Timockenko llega a Presidente.
Recuérdese que es Senador Antonio Navarro y fue Alcalde Gustavo Petro, ambos del M19, así, se piensa que cualquiera de los demás miembros de la guerrilla, algo difícil, pero no imposible, por el dinero de que disponen, podría escalar posiciones pol1ticas.
Quizás tanto como el dinero le ayuda el desgaste de la clase pol1tica y de los partidos.
Que el narcotráfico sea un delito conexo al delito político tiene como objeto evitar que a los guerrilleros se les juzgue como a los capos y, en consecuencia, puedan ser incluso extraditados a USA: Timochenko, Iván Márquez, Catatumbo, Santrich, jamás habrían firmado sin esa cláusula y, como no fueron vencidos, sino que fue una negociación, ese es parte del costo de la paz.
En este sentido, visto que el dinero no ha sido parte del acuerdo, el Estado y las organizaciones anticrimen del mundo podrían perseguir esa fortuna, incluso decomisarla.
La Constitución del país más constitucionalista del área, si, ciertamente queda maltrecha como fruto de los acuerdos, pues incluye, reducción de la cantidad de electores para los plebiscitos, del trámite de la reforma, sistema de aprobación rápida de leyes, revisión de la cosa juzgada e inclusión de los acuerdos al bloque de constitucionalidad: Si todo eso será efectivo después de los acuerdos, con la cantidad de comités designados, sobre todo para el tema agrario, es aun materia incierta.
La cantidad de dinero que tienen los jerarcas de las FARC, como dijimos antes, es desconocida, también lo es el lugar en donde se encuentra, empero, lo que si se evidencia en las 297 páginas de los acuerdos es que dispusieron de la mejor asesoría posible en acuerdos bélicos y en justicia transicional.