Comunidad judía critica publicación

La Comunidad Judía de Santo Domingo expresa su preocupación e indignación ante un artículo publicado en el Diario Libre de fecha 28 de enero titulado “Rabinos comparan situación descendientes de haitianos en RD a la que ‘han vivido los judíos a través de la historia’ “.

Según reporta la publicación, un grupo de nueve rabinos y la Hermandad de Justicia Global (traducido al español) con el Servicio Mundial de Judíos Americanos, afirman que “la crisis humanitaria en la República Dominicana con respecto a la deportación de ciudadanos haitianos se asemeja a algunos de los capítulos más difíciles y perturbadores de la historia judía”.

La comunidad rechaza las afirmaciones y otras que aseguran en este país tenemos sentimientos anti haitianos y que se queman banderas haitianas para pedir que estos ciudadanos se marchen.

Comparar la crisis humanitaria que se vive en Haití y el accionar del gobierno dominicano en aras de controlar su problema migratorio, con los nazis, es burlarse de nuestro pasado y simplificar la tragedia del pueblo judío.

También demuestra la selectiva ceguera de estos rabinos ante los esfuerzos que hace este país para regularizar a miles de indocumentados.

Aseverar de que aqui somos anti haitianos y xenófobos, no podría estar más alejado de la realidad.

Prueba de esto fue la gran respuesta humanitaria que la República Dominicana le ofreció a Haití, luego de la tragedia del terremoto en ese país, donde el país literalmente abrió sus fronteras y hospitales para atender los heridos haitianos. La República Dominicana ayudó humanitariamente más que ningún país que acudió a socorrer a Haití.

La República Dominicana tiene el legítimo derecho de regular la situación migratoria del territorio nacional. Por eso existen fronteras y leyes migratorias.

La comunidad judía de Santo Domingo tiene una eterna gratitud con el pueblo dominicano que nos acogió durante la época más oscura de nuestra historia, bajo la persecución nazi en Europa. Fue el único país de la región que ofreció acogernos.

Es irónico que ahora se compare este país con el régimen nazi. Ahora es nuestro momento de defender las acciones del gobierno dominicano, y alzar la voz cuando se profesan infamias.