La salud también entra por los pies

“Tú no duermes bien”, dijo Alex Liu y ella se quedó asombrada por la forma en que lo supo.

“Tienes muchos problemas del estómago y a veces no haces bien la digestión”, añadió él unos minutos después y la sorpresa de ella fue incluso mayor.

No se encontraba en un consultorio médico, y mucho menos frente a un adivino. Se trataba de una sesión de reflexología podal en el centro Bai Hui.

La reflexología, un tipo de masaje de pies, tiene una larga historia en la medicina tradicional china y se le atribuyen múltiples beneficios.

Uno de esos beneficios, según Ana Han, experta en reflexología y propietaria junto a su esposo Julio Wang del centro, es que permite saber cómo está funcionando el organismo y así prevenir enfermedades.

El masaje del pie, parte del cuerpo donde hay miles de terminaciones nerviosas, también funge como coadyuvante para hacer más efectivo el tratamiento clínico contra distintos padecimientos.

“Segundo corazón” Por su importancia para la salud, los pies son como un segundo corazón, dice Han. Insiste en ello una y otra vez.

“Todo punto de energía del cuerpo está debajo de los pies”, explica.

Al estimular esos puntos mejora la circulación y se eliminan toxinas. Los resultados van desde mantenerse en buena forma y aumentar el nivel de energía hasta prevenir los trastornos del sueño, la presión arterial alta, la artritis reumatoide, la diabetes, la trombosis cerebral y el dolor y adormecimiento del pie.

A juzgar por las palabras de Han, la salud no solo entra por la boca (recomienda acompañar la reflexología con una dieta sana), sino también por los pies: “Masaje de los pies es muy saludable”.

Beneficios de la reflexología Un diabético que por primera vez en mucho tiempo sintió molestias durante una pedicura, un hombre que hace dos décadas sufrió un derrame y hoy no muestra señales de ello, una joven madre que recupera la energía para sus actividades cotidianas, una mujer que opta por esta terapia alternativa luego de ver a su esposo recuperarse de sus dolores de pierna.

Las historias que se escuchan en un centro de reflexología podal son tan variadas que te preguntarás qué hay detrás de esta disciplina de la medicina tradicional china.

La reflexología parte de la idea de que al cuerpo humano lo recorren zonas de energía que forman áreas reflejas en el pie. Esas zonas reflejas, informa un documento que el centro Bai Hui pone en mano de los clientes que acuden por primera vez, corresponden a los diferentes órganos del cuerpo. Estimularlas mediante el masaje promueve el adecuado funcionamiento de los órganos y, en consecuencia, la salud del organismo.

En la antigüedad, tanto chinos como japoneses, indios y egipcios procuraban el bienestar de la persona mediante la estimulación de los pies. Sin embargo, la reflexología moderna se desarrolló en el siglo pasado: comenzó con el trabajo del médico norteamericano William H. Fitzgerald y sus seguidores y, más tarde, con la labor de la masajista norteamericana Eunice Ingham y la enfermera alemana Hanne Marquardt.

Importancia hoy La china Ana Han, experta en reflexología que hace once años fundó en Santo Domingo el centro Bai Hui, comenta que la alimentación de hoy se basa en productos procesados, químicos y frituras. Este abandono de lo natural trae como consecuencia la acumulación de toxinas y la aparición de múltiples padecimientos.

La reflexología se presenta entonces como una forma de prevenir y paliar enfermedades. Entre las más vistas en el centro, Han cita hipertensión, diabetes, colesterol alto y artritis.

“Las personas toman pastillas y no ayudan a sanar bien, pero cogen masaje y los dos juntos (masajes y medicamentos) ayudan”, dice la nativa de Beijing, que dirige el centro de masaje junto a su esposo, Julio Wang, doctor y especialista en medicina natural.

De modo que, a quienes ya padecen algún problema de salud, recomienda la reflexología para apoyar -no sustituir- el tratamiento prescrito por su médico.

A quienes no han sido diagnosticados con ninguna enfermedad, la experta les sugiere tomar masajes de pies con fines preventivos... o para saber cómo anda su salud. Para empezar bastan 40 minutos.

Una sesión: 40 minutos ¿Cómo es una sesión de reflexología? Primero sumerges tus pies en agua caliente durante 20 minutos (el agua contiene una combinación de hierbas medicinales que varía dependiendo de la necesidad del paciente). Al sacarlos del agua, el reflexólogo envuelve tus pies en una toalla para conservar el calor. Luego empieza a masajear, un proceso que le toma otros 20 minutos.

Con la yema de sus dedos, la palma de sus manos y los nudillos (en ocasiones con un pequeño artilugio de metal), el reflexólogo explora y estimula los 62 puntos de energía del pie, si bien dedica más tiempo a las áreas problemáticas del individuo.

¿Duele? En ocasiones, cuando hay algún órgano afectado o problemas graves de circulación. Pero la molestia, aclara Han, debe disminuir en los masajes subsiguientes porque una de las ventajas atribuidas a la reflexología es, justamente, que mejora la circulación.

La especialista recomienda iniciar el tratamiento con sesiones durante cinco días consecutivos para comenzar a experimentar los efectos positivos de la reflexología.

Este tipo de masaje podal se aplica a cualquier edad. Solo está contraindicado en embarazadas con menos de tres meses de gestación o más de siete. En el primer caso, podría causar una pérdida; en el segundo, un parto prematuro.

Si te sientes bien, te ves bien Han asegura que la reflexología también influye en la belleza. Como el masaje podal ayuda a eliminar toxinas, argumenta, la sangre se limpia y la circulación mejora. El resultado: aparecen menos manchas en el rostro.

Además -añade Han- ya que la reflexología te ayuda a descansar mejor, te sientes y te ves mejor.

TRATAMIENTOS ALTERNATIVOS El centro ofrece otras terapias que complementan la reflexología. Entre estas se encuentran los masajes de cuello, faciales y de cuerpo, la electroacupuntura y los masajes meridionales.

Los masajes de cuello reducen el estrés, y son útiles para personas que trabajan en oficinas y que acumulan mucha tensión en cuello, nuca, hombros y espalda. Los de cuerpo, asevera Ana Han, estimulan la circulación y tienen efecto desintoxicante, mientras que los faciales mejoran la apariencia del rostro.

La electroacupuntura, en tanto, se basa en el mismo principio que la acupuntura tradicional, pero prescinde de las agujas y usa impulsos eléctricos.

Para los masajes meridionales (que se apoyan en la teoría de que la energía del cuerpo circula a través de este por canales llamados meridianos) los terapistas emplean un máquina especial. Según Han, sus efectos pueden notarse en la circulación y en condiciones como artritis, diabetes y colesterol elevado.

ASÍ PUEDES CUIDAR TUS PIES EN CASA Evita andar descalzo sobre el piso frío. Cuando las plantas de los pies se enfrían -explica Ana- los poros se cierran, impidiendo la adecuada circulación de la sangre y provocando la acumulación de toxinas en el organismo. Luego de bañarte (preferiblemente con agua caliente), masajea con tus manos las plantas de tus pies y así se calentarán. Sumerge tus pies en agua caliente con sal y vinagre por 30 minutos. Luego, masajea las plantas con alguna crema. Eliminarás piel muerta y hongos y te dormirás mejor y más rápido.