Enseñanza gratuita por internet

Uno de los grandes logros de la democratización de contenidos en la internet es, sin duda, la oportunidad que han tenido los internautas para estar más informados y ampliar su capacidad intelectual.

El ejemplo palpable de este logro son los cursos gratuitos en línea sin límite de alumnos (MOOC, por sus siglas en inglés). Estos talleres, dirigidos por profesores de diferentes partes del mundo, alcanzaron su popularidad en 2011.

¿A qué se ha debido su auge? A que las tecnologías desarrolladas en las dos últimas décadas han provocado un incremento en la oferta educativa a través de la red, por lo que ahora los usuarios interactúan con la información y el conocimiento de una manera más activa en una gran variedad de formatos y actividades de aprendizaje, según explica la investigadora en el tema Mariona Visa Barbosa.

En su libro sobre desarrollo de las nuevas herramientas docentes (editorial ACCI, 2014), atribuye la aparición de los MOOC a la evolución de la web 2.0, que ha creado un entorno en el que los internautas quieren ser los protagonistas y compartir información y conocimientos.

Ofertas para desarrollar los conocimientos Desde las universidades más prestigiosas hasta los centros de capacitación de educación superior ofertan cursos gratuitos en línea para reforzar los conocimientos de los alumnos universitarios.

En los cursos gratuitos en línea sin límite de alumnos o Massive Open Online Courses (MOOC), los temas relacionados con la tecnología, economía, marketing y liderazgo son de los más encontrados en las ofertas que están abiertas a quienes quieren ampliar sus capacidades intelectuales.

La única inversión que deben hacer los alumnos es la de tiempo y contar con conexión a internet. Aunque, por lo general, los centros evalúan a los estudiantes para ver qué tanto van aprendiendo.

Además, los centros otorgan un certificado de participación, el cual tiene un costo y pueden optar por ellos quienes cumplan con los requisitos del curso.

¿Cómo reciben las clases los alumnos? Un MOOC está compuesto por videos, foros (para crear retroalimentación y contacto con los participantes), documentos escritos y pruebas de conocimiento.

Limitaciones Aunque solo se necesita de conexión a internet para tener desde casa o cualquier otro lugar una educación que aporte a las capacidades adquiridas en la universidad, los MOOC tienen sus limitaciones.

No se trata de tecnología o contenidos, porque los centros que generalmente se dedican a ofrecer estas capacitaciones son altamente calificados y con una reputación comprobable, la limitación de estos cursos son las interacciones entre profesor y alumno, y la baja satisfacción.

Así lo aseguran varias autoras en el libro “Tendencias emergentes en evaluación formativa y compartida en la docencia. El papel de las nuevas tecnologías” (editorial Universidad Cantabria, 2015).

Natalia González Fernández, Irina Salcines Talledo y Elena García Ruiz agregan en este escrito que los cursos masivos facilitan a los instructores el conocer mejor al alumno y hacer seguimiento de manera individualizada y sistemática; también facilita la meta de evaluación y retroalimentación de todo el proceso de aprendizaje de más calidad.

Popularidad en poco tiempo En 2008, David Cormier y Brian Alexander introdujeron el término “Massive Open Online Courses (MOOC)” para describir un curso de conectividad de conocimientos que, en primera instancia fue diseñado para no más de 25 estudiantes, pero se abrió para todos los interesados y el resultado fue de 2,300 personas inscritas.

Luego, en 2011, Sebastian Thrun y sus colegas de Stanford tuvieron 160,000 participantes en un curso sobre inteligencia artificial, según se reseña en el “Anuario thinkepi 2015: Análisis de tendencias en información y documentación”, realizado por Tomás Baiget e Isabel Olea.