Santo Domingo 23°C/26°C thunderstorm with rain

Suscribete

COSAS DE DUENDES

Un hogar para Negrita

Me cuentan que Negrita es callada y obediente. Su vida representa una incógnita, una aventura cuyo inicio desconocen las personas que ahora quieren ayudarla. Resulta que Negrita, tal vez, no sea su nombre. Se lo adjudicaron al azar debido al color de su pelaje y de sus ojos pero nadie sabe de dónde vino, si tiene dueño y, de ser así, cómo la habrá bautizado. Ella estaba en el parque de Alma Rosa, en la avenida San Vicente, seguía a un hombre sin hogar que, de alguna manera, la adoptó y le daba de comer de lo que él conseguía. A donde iba este señor, también iba Negrita que, al parecer, no le gusta estar sola y se procura la compañía de seres humanos. En su peregrinar sin rumbo ni dueño, ambos se necesitaban. “Se quedaba tranquila, no molesta”, le comentó el indigente a dos rescatistas de animales que se interesaron por Negrita. Estas personas son una madre y su hija, Virginia Bueno, quien acostumbra a ayudar a perros y gatos desamparados. A estas señoras, Negrita se les acercó en una ocasión y las siguió por el parque todo el rato, entonces, le dieron de comer convencidas de que la perrita iba a devorar la comida. Pero ella se hizo la importante, no tocó ni un bocado. Es probable que debido a que se encontraba enferma. Pues una semana más tarde, al regresar al parque, les pareció que este animalito tenía una herida. La llevaron a la clínica veterinaria “Animal Servet”, donde determinaron que se trataba de un tumor. El pasado martes la operaron, ahora se encuentra convaleciente. El doctor diagnosticó otro tumor que le debería ser retirado cuando la esterilicen, si así quiere hacerlo la persona que se haga cargo de ella. Negrita es mestiza, lleva en la sangre alguna mezcla de raza indeterminada. Por sus dientes, el médico asume que debe tener de cuatro a cinco años. Necesita ayuda, alguien dispuesto a darle un hogar, para que se recupere del postoperatorio, y gente que colabore con sus gastos médicos. Según sus rescatadoras, los veterinarios la consideran una paciente ejemplar. No ha dado ningún tipo de problema, me cuentan, y a sus amigas les gustaría quedarse con ella pero ya han rescatado a otros perros y no disponen de espacio. Tampoco yo, que fui contactada para ver si podía convertirla en parte de mi familia. No pude ayudar así a Negrita, pero algunos de nuestros lectores sí podría hacerlo y quise darle a ella esa oportunidad. Si le interesa ayudar a Negrita, por favor, llame a Virginia al 829 921-3991.

Tags relacionados