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PRENSA JOVEN

Juventud dominicana sumergida en la Historia

Obras. Franklin Franco escribió alrededor de 30 libros, los cuales junto a su biblioteca personal fueron donados al Museo General de la Resistencia.

Obras. Franklin Franco escribió alrededor de 30 libros, los cuales junto a su biblioteca personal fueron donados al Museo General de la Resistencia.

Historia no es solo conocer las fechas en que ocurrieron los hechos. Es más que eso. Es saber sobre los acontecimientos ocurridos y los resultados de estos. República Dominicana tiene mucho qué contar sobre sus orígenes, ocupación, independencia..., y muchos jóvenes se han empapado de ello.

De la mano del profesor, sociólogo e historiador Franklin Franco, quien por años se desempeñó como profesor de historia en la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD), muchos pudieron transportarse a épocas remotas que dieron origen a lo que hoy es República Dominicana.

“Franklin se enfocaba en que los estudiantes debatieran los contenidos, hablaba de la historia dominicana con un dominio que hacía que todos los que estábamos en el aula nos trasladáramos hacia la época sobre la cual él contaba. Su objetivo era que quedaran aprendidas las causas más que las fechas. Le llamaban ‘el gurú de la historia’, pues era un catedrático a carta cabal”, cuenta Dalton Herrera, quien fue su estudiante.

El testimonio de Dalton refleja que, aunque la historia no es la asignatura predilecta de la mayoría, cuando se imparte con vasto conocimiento y con creatividad, puede cautivar hasta al más apático de los estudiantes.

Vinicio De los Santos dice que tuvo la oportunidad de compartir con el catedrático en los pasillos y en las tertulias entre maestros, y que ello fue suficiente para describirlo como celoso con el contenido metodológico de las asignaturas. “Recuerdo el dominio que tenía con respecto al proceso histórico y social. Pude apreciar mientras escuché una de sus clases, que quería despertar una conciencia crítica en sus estudiantes, esa frase de que pensar diferente no es un delito, va perfectamente con él”, agrega de los Santos.

Fallecido el 15 de junio de 2013, Franco, quien también impartió docencia fuera del país, logró despertar el interés de jóvenes estudiantes que, antes de tomar clases con él sobre historia, no habían mostrado apasionamiento por los hechos que marcan la historia de República Dominicana.

El tema sobre la referida materia se trata a propósito de que próximamente serán puestas en circulación sus memorias, así como una colección de todos sus libros. Es importante saber que la citada colección estaba siendo redactada por el propio Franco. Además, el 15 de marzo sale su publicación, “Los negros y los mulatos”, traducida al inglés.

Un legado familiar y social A juicio de su esposa Ángela Soto y de sus hijos Francisco y Ana Carolina Franco, el historiador dominicano es el único en haber recibido un premio que otorga Casa de las Américas. Lo recibió en el año 1966, con el ensayo “Clases, crisis y comando”. “Fue un apasionado de la educación, que concentró la mayor parte de su vida enseñando en la UASD, porque quería que los jóvenes conocieran la verdad sobre la ascendencia dominicana”, asegura Soto.

A casi tres años de su muerte su legado se mantiene firme y vivo tanto en su familia como en jóvenes estudiantes que aseguran haber aprendido de él la verdadera historia del país. Su generosidad era tal que, no solo donó su biblioteca personal, sino que luego de hacerlo, volvió a dotarla de libros en dos ocasiones. Tras su fallecimiento su familia se ha encargado de que esas obras sean llevadas al Museo General de la Resistencia, entidad a la que hizo el donativo.

“Escogió este lugar porque tenía la intención de que allí se conformara una comisión de la verdad, para resolver crímenes que han quedado impunes desde la época del tirano Rafael Leonidas Trujillo”, dice su hija.

Recuerdan que el sociólogo e historiador sentía preocupación por el conocimiento que la nueva generación tenía sobre la historia. Eso lo llevó a ceder todos sus libros para que los jóvenes tengan acceso a esa información valiosa sobre la cultura y la ascendencia del pueblo dominicano.

UNA FUNDACIÓN PARA MULTIPLICAR SU LEGADO Con lágrimas en los ojos, su hija Ana Carolina Franco, cuenta con orgullo la pasión que sentía su padre por la Patria y por sus estudiantes, a quienes les tenía tanto cariño.

La familia está creando una fundación para que el legado de Franklin Franco no muera, a través de la cual promoverán las ideas del escritor, y se realizarán concursos dirigidos de manera especial, a los jóvenes. “Nos vamos a enfocar en la nueva generación porque no se está promoviendo ni dando valor a la juventud, que era la inspiración del esquema de enseñanza de mi padre” expresa Francisco Franco.

Realidad. A través de la fundación creada en memoria de Franklin Franco, la familia busca organizar concursos de historia en los cuales los jóvenes sean los protagonistas.

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