Construir un futuro seguro

Muchas opiniones y preguntas he escuchado sobre mí, en tu boca. ¿Que para qué trabajo tanto?, ¿por qué cuido y protejo aquello por lo que trabajo, si nada me llevaré?, ¿que por qué, con todo lo que tengo, no dejo de trabajar y me voy a descansar?, entre muchas otras cosas más.

Te diré que mientras no exista un sistema que me garantice mi salud y la de mi familia, un techo y alimento, tendré que hacerlo aunque no quiera. El dinero se gasta y se desvanece, hasta acostado en la cama. Aun después de que me haya ido, seguirán gastando para preservar mi nicho. Lamentablemente vivimos bajo un sistema completamente estricto, donde cada día la salud y el tener un techo seguro cuestan demasiado.

¿Qué le piensas ofrecer a tus hijos cuando tengan hambre, y con qué costearás su salud cuando sin esperarlo lleguen sus males? ¿Con qué les pagarás una buena educación y les garantizarás que tengan un buen trabajo, si a los 20 gastas todo pensando que nada te llevarás, pero Dios te regala 90 años?