Razón para que nos extrañen

Durante nuestro paso por este mundo, dejamos huellas. Algunas dignas de ser pisadas, otras ideales para ser borradas. Todos estamos conscientes de cómo son nuestras pisadas, y por supuesto, tenemos el chance de mejorarlas, mantenerlas o perfeccionarlas.

Son ellas las que permiten que cuando no estemos, nos extrañen por nuestras buenas acciones, o porque nuestra ausencia les provoca bienestar. ¿Qué elijes tú? Cierra tus ojos por un instante e imagina tu ausencia, ya sea en el trabajo, en tu hogar o por qué no, en el mundo, y notarás la reacción de quienes te rodean. Verás que si tus actos han logrado calar en tus hijos, tu pareja, tus amigos, compañeros de trabajo..., tu ausencia será un aumento y habrá un deseo inmenso de que regreses, y un dolor profundo si es que has partido de este mundo. Observarás que habrá lágrimas, un duelo por superar, anécdotas que contar y un legado que imitar. Sí, porque cuando a tu paso vas dejando ese vacío que nadie más puede llenar, por largo tiempo o para siempre ocuparás un espacio en la mente de quienes aprendieron a valorar tu desprendimiento, solidaridad, humildad, respeto hacia los demás, y todas esas cosas positivas que te distinguen entre el resto. Sé que sientes que es como estar en una ciudad fabulosa, donde todo fluye de la mejor manera. Ahora abre tus ojos, y ciérralos de nuevo, pero esta vez, imaginando cómo reaccionan ante tu ausencia cuando lo que has dejado es resentimiento, dolor, prepotencia, humillación...

Te darás cuenta de que lo único que hace que las personas te recuerden son los momentos de paz, alegría y tranquilidad que están viviendo porque tú ya no estás. Está claro que no podemos ir por la vida atropellando a los demás sin que se nos pase luego la factura por nuestros actos egoístas.

No le construyas un monumento a tu ego a expensas de los demás, no te consueles queriendo evadir la verdad de que imprescindible solo Dios.

Recuerda que sin importar lo bueno o malo que seas, cuando no estés, todo seguirá marchando en tu casa, tu trabajo, tu comunidad y en este mundo que, a veces creemos que es nuestro.

Nunca es tarde para reflexionar sobre esta realidad que compartimos los seres humanos. Aprovecha que hoy inicia un mes que nos invita a amarnos como hermanos, que nos da la oportunidad de resarcir nuestros errores y que nos lleva a creer que hay un mañana mejor. No esperes a que sea tarde para querer que te extrañen de la mejor manera, da el paso. ¡Feliz Navidad!