Tipo de lentes

Hay dos tipos diferentes de diseño de lentes correctivos: visión sencilla, una lente de uso general diseñado para corregir la visión a distancia, y multifocal, diseñado para corregir tanto la visión a distancia y visión cercana (la porción superior se centra en la visión a distancia, mientras que la parte inferior se utiliza para actividades de cerca).

Lentes multifocales son gafas usadas para corregir la presbicia, disminución de la capacidad natural del ojo para enfocar objetos cercanos que viene con la edad. El tipo bifocal tienen una corrección para la lectura en la mitad inferior de la lente y otro para ver a una distancia en la parte superior. Algunos lentes especializados también pueden tener segmentos en la parte superior para aquellos que necesitan para mirar hacia arriba en los objetos que se encuentran en el rango intermedio o cerca (bifocales doble D). Trifocales son lentes con tres correcciones de lentes diferentes - la visión a distancia, la visión intermedia y la visión de cerca - en un conjunto de anteojos. Los lentes progresivos funcionan generalmente la misma forma que los bifocales o trifocales; sin embargo, tienen una transición suave entre la distancia y cerca de las áreas focales líneas divisorias en lugar visible. Mientras que la transición invisible de las lentes progresivas puede ser más agradable estéticamente, las áreas focales son relativamente pequeñas porque más espacio lente se utiliza para las zonas de transición. Los lentes progresivos causan más distorsión que otros tipos de lentes, haciéndolos más difícil de llevar aproximadamente el 10 por ciento de la población.

Si usted no necesita corrección para ver a distancia, puede obtener lentes para leer de venta libre en las farmacias, librerías y muchas otras tiendas al por menor para corregir la presbicia. Ningún ejercicio o medicamentos pueden revertir la presbicia. Retrasar el uso de gafas de lectura es de ningún beneficio. Es probable que tenga que cambiar su receta de anteojos de vez en cuando, entre las edades de 40 y 60, debido a que la lente natural del ojo seguirá perdiendo flexibilidad y, por lo tanto, la capacidad de enfoque.