PIENSO Y LUEGO ACTÚO
¡No te detengas!
En muchas ocasiones nos llenamos de falsas expectativas, pensando que siempre todo nos saldrá perfecto. Obviamos que hay posibilidades de que las cosas sean diferentes, y es entonces cuando al encontrarnos con los obstáculos nos frustramos y nos enojamos. Sin embargo, es mejor ser realista, y si las cosas no nos salen como planeamos, tratar de aprender qué es lo que eso nos quiere enseñar, y así nos permitiremos perfeccionar nuestro carácter, ya que no es posible crecer si no aprendemos a lidiar con los obstáculos. Hay cosas que no podemos cambiar, dejemos esas en las manos de Dios.