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Otra limitación

La cultura del centralismo afecta autonomía cabildos

El centralismo es una de las principales causas que restringen la autonomía municipal, según Rafael Hidalgo

Autonomía. El secretario de la LMD, Johnny Jones, afirma que hay autonomía en la municipalidad y que cada día se está respetando más esa independencia.

Autonomía. El secretario de la LMD, Johnny Jones, afirma que hay autonomía en la municipalidad y que cada día se está respetando más esa independencia.

Los ayuntamientos, según la ley 176-07 del Distrito Nacional y los municipios, tienen 15 competencias propias que deben ejecutar en sus demarcaciones, pero según ese sector, el principal obstáculo es la limitación de recursos económicos.

La Federación Dominicana de Municipios (Fedomu) y Liga Municipal Dominicana (LMD), coinciden en que muchas de esas funciones no son implementas por el aspecto financiero.

De las competencias propias, los ayuntamientos tienen limitaciones para cumplir con el ordenamiento del territorio y gestión del suelo, la pavimentación de las vías públicas, y la construcción y mantenimiento de caminos rurales.

También, según el presidente de Fedomu, Rafael Hidalgo, los cabildos tienen dificultad para ordenar y reglamentar el transporte público y la promoción, fomento y desarrollo económico local.

En cuanto a las que se han priorizado están el mantenimiento y uso de las áreas verdes, la construcción de aceras, contenes y caminos vecinales.

También, la construcción y gestión mercados, preservación del patrimonio histórico y cultural, la construcción y gestión de cementerios, servicios de limpieza y ornato público, además de la recolección y disposición final de residuos sólidos, entre otras.

El déficit en las capacidades administrativas de los ayuntamientos es uno de los factores que contribuyen a la pervivencia del centralismo, que de acuerdo con Hidalgo, es uno de los principales elementos que restringen la autonomía municipal.

“El centralismo determina que muchos asuntos de competencia municipal son abordados directamente por entidades del nivel nacional, como ha sido el caso del ordenamiento y reglamentación del transporte público urbano”, indica.

Sostiene que “la cultura centralista” determina que continuamente diversas autoridades actúen en los territorios desconociendo las atribuciones que la Constitución, la Ley 1-12 de Estrategia Nacional de Desarrollo, la ley 176-07 y otras dan a los ayuntamientos.

Johnny Jones, secretario de la LMD, afirma que los ayuntamientos no tienen disponibilidad de recursos “frescos” porque la gente tradicionalmente no paga por la recogida de la basura, lo que ha generado que algunas funciones las obvien.

Es por eso que los ayuntamientos se han concentrado en los requerimientos de la población, como el rescate de espacios públicos y ordenamiento territorial.

Aseguró que si hay autonomía y que cada día se está respetando, aunque consideró que la mayor independencia que puede tener un cuerpo es la capacidad financiera. Dijo que dentro del programa “Dominicana Limpia” se está buscando la manera que las arcas de los ayuntamientos a través de la cobranza de la basura mejoren, lo que le daría mayor autonomía.

(+) LIMITACIONES DE LOS AYUNTAMIENTOS Obstáculos: Hidalgo, quien también es alcalde de Azua, afirma que la limitación de recursos económicos se debe a los bajos ingresos que reciben por las transferencias del Gobierno central y por lo baja que son sus propias recaudaciones.

Explicó que las municipalidades reciben menos del 3% de los ingresos corrientes no especializados de la Ley del Presupuesto General del Estado de Ingresos y Gastos Públicos, y en los años anteriores lo máximo que recibieron fue un 3.77%, cuando la Ley 166-03 dispone que a los ayuntamientos se debe transferir un 10%.

Los ayuntamientos captan solo el 18% por recaudación o pago de los servicios que ofrecen, y esto se debe fundamentalmente por falta de equipos adecuados, de personal competente, y de campañas de información y educación ciudadana para crear una cultura de pago.

Recordó que según un estudio del Programa de Apoyo a la Sociedad Civil y las Autoridades Locales (PASCAL), el 82% de los camiones compactadores y el 96% de los equipos pesados empleados en la recolección y disposición de los desechos han superado los cinco años de vida útil.

“Solo para poder pagar el salario mínimo a todo el personal que labora en los servicios y reponer el parque vehicular obsoleto vinculado a la prestación de servicios, los ayuntamientos necesitan más de 2 mil millones de pesos”.

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