Vecinos refuerzan con fe sus vidas en Boca de Cachón

Esta comunidad, concebida como un proyecto modelo de inversión social, continúa avanzando a pesar de que algunos de los programas que fueron contemplados para ayudar al sostén de la vida de sus moradores no han marchado con la celeridad esperada.

Rufino Pérez (Naido), que tiene un pequeño cultivo de limones en el patio de su casa, destacó el cambio de vida que ha tenido tras su trasladado desde la orilla del Lago Enriquillo hasta su nueva casa.

Pérez, que perdió 50 tareas bajo las aguas del lago, recibió una casa con 64 metros cuadrados de construcción, con una tarea que tiene ya sembrada de limón y melón, para contribuir con su economía familiar

Él, igual que la mayoría de los munícipes de esta zona, está a la espera de que sean completados algunos de los programas, en especial el agrario, que los devolvería a su ocupación habitual, la agricultura.

Se refieren a las 7,429 tareas que el Instituto Agrario Dominicano (IAD) pretende convertir en un asentamiento, para replicar la experiencia de Espartillar, en Duvergé, donde unas 5 mil tareas fueron sembradas de sorgo, maíz y alimento para el ganado.

“Aquí el nivel de vida ha cambiado; así como se están mudando la gente de La Barquita, así nos mudaron a nosotros, hasta con una sola cama, y ya la gente tiene muebles y comedor”, relata Iker Medina, dirigente comunitario.

Este proyecto, indicó, le ha permitido cambiar su nivel de vida y hay gente a las que hasta se le ha enseñado a usar el inodoro.

Medina asegura que la mayor parte de las ejecutorias han sido exitosas, aunque algunas no han sido ejecutadas al tiempo en que fueron proyectadas

La vara de pescar

La mayoría de las obras que están paralizadas son municipales. Todas fueron entregadas para darle continuidad, pero la alcadía las ha abandonado”, explicó Roberto Cuevas Florián (Beto).

Este hombre es el alcalde electo, quien ha prometido retomarlas a partir del 16 de agosto, cuando asuma la dirección municipal de la localidad.

Durante el acto inaugural del proyecto, el presidente Danilo Medina advirtió que la comunidad también tenía un compromiso social con los proyectos, en el que iba a ser acompañada.

Contrario a como sucedió en La Barquita, en este lugar no se pudo integrar un patronato, debido a las diferencias entre las autoridades gubernamentales , las organizaciones sociales y la alcaldía, debido al reparto de las casas. Fue pública la dificultad que se produjo porque muchos se negaban a ser desalojados, a pesar de que estaban bajo las saladas aguas del lago y otras familias que reclaman más de una vivienda para adultos mayores que vivían con ellos.

“Hace dos años que nos entregaron a Boca de Cachón con todo hecho y todo está deteriorado, porque el alcalde dice que no va a asumir las obras del gobierno, alegando que están inconclusas”, refiere Cuevas, quien dice solo necesita “la vara de pescar.”

Según vecinos, en ese lugar funciona una clínica con los servicios requeridos y una ambulancia para casos de emergencias o traslado a hospitales regionales.

Tiene una estancia infantil y una moderna edificación escolar donde funcionan una escuela y un liceo, ambos en tandas extendidas, con alimentación incluida. El politécnico aún no está funcionando porque no están los profesores que se requieren para esta área.

Tenían un servicio de luz 24 horas, pero dependía de una sub estación situada en el municipio La Descubierta, “ pero los equipos conectores fueron destruidos durante un reclamo contra la compañía Edesur.

Esta situación ha impedido que puedan tener agua de consumo disponible las 24 horas, según explicó Medina, quien dijo que se construyó un pozo alterno en la comunidad San Bartolomé con capacidad de suplir tan vítal líquido para las actividades humanas.

Indicó que el viejo acueducto está siendo reparado, algo favorable para disponer de agua seguido en los próximos días. A pesar de eso, dijo, la comunidad recibe agua diaria, pero dividido en dos bloques, a uno por día.