Siete denuncias que se olvidaron con el proceso electoral

La campaña electoral se va y no sola. Parte con un manto de denuncias, tensiones, pugilatos… y muchas denuncias que al parecer han quedado en el aire, sin más que la reproducción que hicieran en su momento los medios de comunicación.

No es nuevo el fenómeno de denuncias y acusaciones durante procesos electorales, y tampoco parece tener fin entre los actores políticos, imbuidos por el calor y tensión que provoca el poder político en juego en cada elección.

El recuento es preciso comenzarlo por la declaración de Roberto Rosario, presidente de la Junta Central Electoral (JCE), que aseguró como un hecho las intenciones de hacer colapsar las elecciones generales, a las que estaban convocados 6.7 millones de personas a elegir 4,106 cargos públicos.

1 “Por la información de que disponemos, les puedo asegurar que hubo intentos reales de hacer colapsar las elecciones. Incluso, algunas mentes muy creativas daban como un hecho que a las tres de la tarde sería necesario interrumpir el proceso de votación y fijar una nueva fecha”.

2. El 23 de mayo pasado el ministro administrativo de la presidencia, José Ramón Peralta, aseguró que al país llegó “un hacker colombiano” para distorsionar los resultados electorales con la intervención de los sistemas de la JCE. El funcionario público, uno de los más cercanos del presidente Danilo Medina, acusó a la oposición de haberlo traído. “Sabemos quién lo fue a buscar a Colombia y cómo vino, y la idea era hackear a la JCE”, señaló en esa ocasión.

3. Osiris Guzmán fue candidato a senador del Partido Revolucionario Moderno (PRM) en San Cristóbal. Sustituyó a Mateo Aquino Febrillet, asesinado luego de una reunión que definiría candidaturas municipales de esa organización. A Osiris Guzmán le allanaron sus oficinas en la Federación Dominicana de Fútbol, de la que es presidente, tan solo un par de días después de ser seleccionado acusado de malversación de fondos.

4 El día de la jornada electoral habrían renunciado 3,000 técnicos encargados de los equipos de escrutinio y registro de asistentes. La información la dio Roberto Rosario y desde entonces varios partidos políticos esperan el listado con los nombres y direcciones de los renunciantes. Un listado de la institución, con más de mil nombres, fue suministrado a un par de medios de comunicación, entre ellos el Grupo SIN. Tras varias llamadas al azar el equipo del programa de investigación El Informe encontró una constante: las personas decían que nunca fueron convocados a trabajar en las elecciones.

5.Esta es curiosa y extrañísima, a la vez: el general retirado Rafael Percival Peña hizo cuatro vuelos rasantes sobre el Palacio Nacional. En cada uno de ellos lanzo panfletos que le promovían como candidato a senador del Distrito Nacional. Apresado al aterrizar la avioneta se declaró en protesta contra la reelección y una supuesta compra de 35 millones de pesos en ropa interior que habrían hecho los senadores del país. “Para blumen y panties”, dijo. A Percival Peña se le retiró su licencia de piloto de por vida.

6. Puede que la más repetida denuncia de cada proceso electoral sea el de compra masiva de cédulas a ciudadanos. El caso es que en República Dominicana la legislación electoral prohíbe la práctica e incluye penalidades basadas en el código penal. A pesar de la constante denuncia nunca una persona ha sido siquiera procesada por estos hechos, y mucho menos condenada. Solo se denuncia ante medios de comunicación y en informes de observación, más nada.

7. El movimiento cívico Participación Ciudadana denunció que el gobierno gastaba 10 millones de pesos por día en publicidad. La respuesta fue prohibir la publicidad estatal durante la campaña electoral y la congelación de la nómina de empleados.

Puede que por la tradición dominicana no sorprenda que esta denuncia solo haya quedado en el papel de los diarios. Al menos de los que las publicaron.