Extranjeros muestran satisfacción al retirar sus carné que regula su status migratorio

Cientos de migrantes que calificaron para recibir un estatus migratorio regular mediante el Plan Nacional de Regularización de Extranjeros continúan en todo el perímetro del edificio de oficinas gubernamentales Juan Pablo Duarte.

El lunes, los extranjeros volvieron a formarse en líneas que rodeaban todo el edificio donde se aloja la oficina para el plan, con el propósito de acceder al lugar y retirar el documento que los acredita como no residentes por un año o no residentes por dos años. Muchos se retiraron felices, luego de varias horas en la fila, tras recibir su carné o sellar su pasaporte.

El domingo pasado la situación era diferente, las filas estuvieron más cortas y el proceso estuvo más ágil. Para hacer más rápido el procedimiento, el Ministerio incorporó la medida de verificar desde la fila a las personas que salieron en las listas de beneficiarios, mediante el papel de registro que se les entregó, a través del uso de un dispositivo tecnológico.

La inscripción para aplicar al proceso migratorio concluyó el pasado 17 de junio con el registro de 288,466 extranjeros de 26 nacionalidades. Posteriormente, el gobierno otorgó un plazo de 45 días para que el Ministerio de Interior y Policía (MIP) analizara y clasificara los documentos y diera respuesta a los solicitantes, pero también para que los que no hubiesen completado su expediente lo hicieran.

Aunque recientemente el MIP aclaró que este plazo era exclusivamente para responder a los migrantes inscritos, también informó que estarán entregando los carnés y los sellos para pasaportes en las 25 oficinas del plan en todo el país, hasta que asista el último migrante.

Del total de inscritos, solo 239,000 extranjeros regularizarán su situación migratoria, mientras que cerca de 49,446 no completó el procedimiento, por lo que no tendrán un estatus legal, y estarán sujetos a repatriaciones.

Aunque el plazo culminó el Gobierno dominicano no ha ofrecido informaciones en cuanto a la tercera fase del plan, que serían las repatriaciones.