La mayoría de los que embarazan a las adolescentes son adultos

Alrededor de un tres por ciento de las adolescentes que se convierten en madres son fruto de una relación con hombres mayores de 30 años; un porcentaje similar es de padres también adolescentes, pero la mayoría de los casos es de vínculos con adultos jóvenes, que no estudian y se dedican a trabajos informales, aseguró ayer la coordinadora del Programa Integral de Adolescente de la Maternidad Nuestra Señora de La Altagracia, Esther Portes. Ayer, de 10 adolescentes entre los 14 y 18 años parturientas ingresadas en la Sala de Adolescentes de dicho centro asistencial, siete tenían hijos de padres entre los 21 y 28 años; dos, de 19 años y uno de 18 años. Ocho de las adolescentes habían abandonado la escuela tras el embarazo. La doctora Portes, quien desde hace 19 años dirige el programa que atiende de manera integral a las adolescentes embarazadas que llegan a la Maternidad La Altagracia, asegura que la realidad de las pacientes que se atienden allí es que la gran mayoría se embarazan de adultos jóvenes de 20 a 30 años, pero que también hay un porcentaje cuyos padres son adultos de mayor edad, que superan los 30 años. Señaló que le llama la atención que de dos años hacia acá también están viendo los casos de adolescentes embarazadas de padres también adolescentes entre 17 y 19 años. Dijo que alrededor del 80 por ciento de las madres viven en pareja con el padre de la criatura. “Cuando los padres son adolescentes de 17 a 19 años, por lo general las niñas están por debajo de 15 años, y casi siempre viven en casa de los padres de ellos, aunque también hemos encontrado casos de niñas con hombres de 38 y 39 años”, señaló. Señaló que lamentablemente en el país hay la costumbre de solamente ir a la justicia a ventilar esos casos cuando se trata de violaciones sexuales propiamente dicho, pero que hay casos en que los familiares llegan a acuerdos económicos con el responsable del embarazo. Dijo que generalmente los Los padres no pueden quedarse callados ante situaciones semejantes". Marisol Tobal, procuradora general adjunta para Niños y Niñas. padres adolescentes son chiriperos, están haciendo trabajos informales en mercados, mecánica, lavando carros, entre otros. Explicó que algunas veces los padres de las criaturas acompañan a la adolescente a las consultas prenatales, pero en otras ocasiones las muchachas van acompañadas de la madre u otro familiar. Entiende que en los últimos años el número de embarazos en adolescentes se mantiene estable, cuando se que en ese hospital rondan cerca del 30 por ciento. La mayoría de los embarazos en esta etapa se registran entre los 17 y 18 años. Portes considera que lo fundamental para frenar esa problemática es la educación y el empoderamiento de la familia en el rol de educar y orientar a las niñas y adolescentes sobre educación sexual. Código La Coordinadora Nacional Adjunta de Niños, Niñas y Adolescentes de la Procura- duría General de la República, Marisol Tobal, llama a los padres a no quedarse callados ante situaciones semejantes y recordó que ellos tienen vigente la Línea 700 donde se pueden denunciar los casos o buscar orientación. Recordó que el Código para el Sistema de Protección y los Derechos Fundamentales de Niños, Niñas y Adolescentes considera como violación sexual la relación de un adulto con una niña menor de 13 años, y que cuando se trata de la relación con una adolescente entre los 13 y 19 años, se considera un abuso sexual cuando la otra persona es cinco años mayor. Dijo que cuando hay una relación entre una niña o una adolescente con un adulto es un caso en el que deben intervenir los padres. Recordó que la ley establece que hasta que no se cumplen los 13 años de edad, son niñas por lo que si está embarazada se trata de una violación si el padre es un adulto. “Si se trata de una niña de 12 años y un menor de 14 años, no se puede considerar violación, porque mental, sicológica y emocionalmente van a la par; pero si la persona es cinco años mayor que ella se considera una violación sexual”, señaló. Explicó que de acuerdo al Código, todavía en aquellos casos en el que está envuelta una adolescente de 16 y un adulto de 25 la ley establece que cae en la categoría de abuso sexual. Dijo que algo que le preocupa es que cuando los padres tienen una adolescente embarazada en la casa, éstos cargan con la responsabilidad alimenticia y toda la res ponsabilidad económica que demanda esa nueva criatura, pero no se le exige al padre responsable. Señaló que el departamento que dirige tiene una línea de denuncia que es la 700, pero que por lo general no se reciben denuncias de ese tipo, y si no llegan, pues, no se puede actuar al respecto. No obstante, explicó, que una vez el caso es denunciado, aunque la querella sea retirada posteriormente, el Ministerio Público debe continuar el proceso, porque el interés superior del niño está por encima de todo. Sugiere a Salud Pública y Educación tomar medidas conjuntas para llevar orientaciones a los adolescentes sobre la importancia de postergar la primera relación sexual, explicarle los riesgos y conflictos que ello genera. Sanciones En el artículo 396 de la Ley 136-03 o Código para el Sistema de Protección y los Derechos Fundamentales de Niños, Niñas y Adolescentes establece que en caso de abuso sexual, el responsable será castigado con penas de dos a cinco años de prisión y multa de tres a diez salarios mínimos establecidos oficialmente. Un caso que ha vuelto a tomar notoriedad en los últimos días es el del locutor Luis Zapata Sánchez condenado a 10 años de prisión en el 2008 por alegada violación sexual y maltrato físico en perjuicio de su actual esposa, cuando ésta aún era menor de edad. Tanto ella como el Círculo de Locutores Dominicanos pidieron recientemente al presidente Leonel Fernández y a la Comisión Nacional de Indultos, su libertad, pero su caso fue rechazado.