Santo Domingo 23°C/26°C thunderstorm with rain

Suscribete

Cine

Amy Adams pasó de mormona a chica de Hooters antes de ser actriz

La actriz y cantante vive un buen momento a nivel profesional, está en dos producciones en cartelera que pudieran ser nominada al Óscar

Hollywood le ha abierto paso a muchas mujeres en el cine que se han convertido en grandes estrellas, una de ellas es Amy Adams, actriz de cine y TV además de cantante. Está en una edad que muchos dicen envidiar (42 años), y en estos momentos es uno de los rostros más vistos en la pantalla grande, gracias a dos producciones que la tienen en cartelera: "Nocturnal Animals" y “Arrivals”.

De repente no pasa mucho tiempo sin que la veamos en un largometraje y con buenos papeles, ha hecho de estafadora, de mujer inteligente, y hasta de una joven monja. Ella la chica estadounidense nacida en Italia, ganadora de dos premios Globo de Oro en la categoría de mejor actriz-comedia o musical y de un Premio del Sindicato de Actores al mejor reparto es uno de los rostros femeninos del momento en Hollywood. Aquí le dejamos algunas cosas que tal vez no sabías de esta celebridad que ha con sus actuaciones se ha robado el corazón de los amantes del cine.

Su origen: Adams comenzó su carrera artística en teatros de cena antes de hacer su debut en pantalla en 1999, en la comedia negra Muérete, bonita. Luego protagonizó la película Encantada de Disney, un éxito crítico y comercial, por la cual recibió una nominación al premio Globo de Oro como mejor actriz-comedia o musical por su interpretación de Giselle.

Premios: Una de sus primeras nominaciones fue al Premio Óscar y al Globo de Oro por su papel de una joven monja en la película La Duda. Aunque interpretó varios papeles dramáticos y cómicos, Adams ha ganado reputación por la caracterización de papeles con disposiciones alegres y risueñas.

Religión: La actriz fue educada en la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días. Por eso ella ha dicho sobre su educación religiosa que le inculcaron un sistema de valores que siguen vigentes en ella. “El lema 'no hagas a los demás lo que no quieras que te hagan a ti' siempre ha estado presente en mí", dijo.

Antes de ser actriz: Cantó en el coro de la escuela y se formó como aprendiz en una compañía de danza local con miras a convertirse en una bailarina. Sus padres esperaban que ella continuara su formación académica, que le habría dado la oportunidad de obtener una beca universitaria. Sin embargo, Amy renunció a ella para practicar la danza. Más tarde declaró en relación con esa decisión: "Yo no era una de esas personas que disfrutaban con los estudios, sin embargo ahora me arrepiento de no haber obtenido una educación universitaria".

En Hooters: Al cumplir los 18, trabajó como recepcionista en una tienda Gap mientras actuaba en teatros de la comunidad. Pocas semanas después de graduarse en la escuela secundaria encontró su primer trabajo como anfitriona en Hooters, Ella dejó el trabajo tres semanas más tarde, después de haber ahorrado lo suficiente para comprarse su primer coche y confesó: "...definitivamente había una gran inocencia en mi interpretación en Hooters. Pero rápidamente aprendí que pantalones cortos y cerveza no se deben mezclar"

Su llegada a los Ángeles: Amy Adams se mudó a Los Ángeles en enero de 1999. Allí, su primer año fue "negro y sombrío", y sentía añoranza por su trabajo en Chanhassen porque "amaba la seguridad y la gente con la que allí trabajaba era como una gran familia para mí". Poco después de llegar a Los Ángeles formó parte de la serie de televisión Cruel Intentions, spin-off de Fox Network, en el papel de Kathryn Merteuil

Tags relacionados