Paloma San Basilio sinfónica
Paloma San Basilio convirtió su noche en el anfiteatro Nuryn Sanlley en una mágica historia de complicidades con un público ansioso por disfrutar de sus mejores melodías.
La artista española ofreció anteanoche un variado repertorio que repasó no solo sus más emblemáticas canciones sino que incluyó temas universales de cantautores de la calidad de Armando Manzanero y Joan Manuel Serrat.
Con una orquesta integrada por 48 músicos, dirigidos por el maestro dominicano José Antonio Molina y acompañada por su director y arreglista musical, Juan Cuattchi, Paloma subió al escenario a las 8:27 minutos, saludó a su público y dio inicio a un concierto que tuvo una duración de una hora y 40 minutos. En ese tiempo, entre canciones y complicidades dejó altamente complacidos a los asistentes que honraron de pie la entrega de la artista, presentada aquí por el veterano César Suárez.
Con un popurrí de canciones clásicas como “Sabor a ti”, “Contigo en la distancia” y “El día que me quieras”, Paloma San Basilio transportó al auditorio al romanticismo de an-taño.
“Cariño mío”, “Demasiado herida”, “Beso a beso”, “Luna de miel”, “Juntos” y “Nadie como tú”, esta última cantada a capela, fueron parte del repertorio que ofreció la cantante en su primer tiempo sobre el escenario hasta las 9:10.
La orquesta Filarmónica Molina, fue la responsable de dar la bienvenida al concierto con la interpretación magistral de piezas musicales que llenaron de emotividad a los asistentes al especial concierto ofrecido por ella.
Al regresar al escenario, a las 9:14 minutos, agradeció al maestro Molina su acompañamiento y antes de interpretar la canción “Mediterráneo”, de la autoría de Joan Manuel Serrat, refirió que este mar se está convirtiendo “tristemente en la tumba de tanta gente” y que ojalá vuelva a recobrar su espíritu, su generosidad y su paz”.
En los últimos meses, miles de inmigrantes de Asia y África usan el Mediterráneo como vía para llegar a Europa.
Interpretó algunas canciones clásicas en inglés como “Stand By Me”, del legendario artista Ben E. King (1967), e hizo referencia a los años de la cultura “hippie”.
Confesó haber sido parte de esa generación de los años 60 que decidió que había que cambiar el mundo y afirmó seguir creyendo en los sueños enarbolados por la juventud de ese tiempo, de los cuales dijo algunos quedan pendientes.
Cerca de las 9:50, con el acompañamiento magistral de la Filarmónica Molina, entonó su clásica canción “No llores por mí Argentina”, con la que salió del escenario para regresar a recibir los aplausos de un público que de pie agradeció un concierto cargado de intimidad y romanticismo.
La noche concluyó a las 10:08, luego de que la artista cerrará con broche de oro con la canción de Juan Luis Guerra “Ojalá que llueva café”.
SOBRE LA ARTISTA ORÍGENES. Paloma Cecilia San Basilio Martínez nació en Madrid, España, el 22 de noviembre de 1950.
EN ESCENA. Se destacan sus apariciones en teatro musical como “Evita”, “El hombre de La Mancha”, “My Fair Lady” y “Víctor o Victoria”.
DESPEDIDA. Anunció su retiro al mundo de la música en el año 2013, pero en estos meses realiza su gira sinfónica por diferentes países.
PERSONAL. Casada en los primeros años de la década de los 70 con el atleta Ignacio Gómez Pellico, tuvo una hija, Ivana Vanessa. Se divorciaron poco tiempo después. Más tarde empezó una relación con el empresario Claudio Rey, con el que lleva más de treinta años.