El amor y la amistad, más que palabras

Febrero es un mes cargado de emociones, afectividad y alegría. El amor se esparce por todos los rincones y se expresa con el intenso rojo, el Cupido, el peluche y el sabor a chocolate. Es una temporada donde los signos se desbordan, construyendo de cada momento un significado singular.

La especialista en Semiótica, Dulce Miguelina Pantaleón, explica que tal y como se registra en la hi+´´orígenes en el ámbito religioso, el cual es un terreno fértil para la cultura y el estudio de los elementos semióticos que se generan durante la celebración del día del amor y la amistad.

El 14 de febrero de cada año las palabras se recogen, mientras que las miradas, los gestos y abrazos vuelan por los aires; con facilidad cada persona disfruta de un acto amable, de un regalito de los vecino o amistades, época que debiera de estar presente en cada persona, todos los días del calendario.

Lupa semiótica Para montarse en el tren de la semiótica y conocer ese mundo de los significados en el espacio del amor, la profesora Pantaleón, expresa que hay que voltear la mirada al estudio de los colores, los regalos, los alimentos, los gestos, la vestimenta, el caminar, el baile y todo lo que se puede decir sin palabras.

RPERSPECTIVA TEÓRICA El profesor de Semiótica Vladimir García, destaca que autores como Aristóteles y A. J. Greimas han buscado estudiar todas las formas de sentimientos humanos; el amor juega un papel especial porque incluye dentro de sí a todos las demás formas pasionales.

14 de febrero: signos y significados La representación de Cupido resulta de la mitología romana, es el dios del deseo amoroso; cuenta la leyenda que este era hijo de Venus, diosa del amor, la fertilidad y la belleza y de Marte el dios de la Guerra.

Según Dulce Pantaleón, catedrática de la UASD, Cupido es representado por un niño alado, con los ojos vendados y armado de un arco; busca significar que el amor es ciego e inocente. La misión de ese personaje es flechar los corazones de los enamorados.

Aunque la ciencia plantea que se ama con el cerebro, las personas dan un valor connotado al corazón como el conocedor primario del amor. Por eso, durante febrero los corazoncitos también están colgados en los pasillos de librerías y espacios de ventas.

El rojo Durante estos días, el rojo ocupa grandes espacios en las tiendas, los supermercados y lugares de trabajo. Incluso las fotos de los usuarios en las redes sociales están relacionadas al amor y la amistad.

Pantaleón precisa que los colores pueden estudiarse desde diversos enfoques; es el caso del psicológico, que se refiere a los efectos que a nivel emocional producen en el estado de ánimo de las personas, lo cual no queda al margen de lo semiótico, pues están asociados a significados. De ahí que el color rojo se interpreta como un enérgico. Además, es el color de la sangre, que está vinculado a la pasión.

Vladimir García, profesor de Semiótica, puntualiza que el rojo por naturaleza cromática pertenece a los colores cálidos, y lo caliente evoca roce, resguardo y atención, componentes esenciales en una relación amorosa.

Un valor cultural y comercial La cultura es el espacio más rico desde donde pueden estudiarse las diversas expresiones verbales y no verbales de los seres humanos; sus variadas formas de vivir en comunidad y las interconexiones realizadas por cada persona con sus semejantes. El amor y la amistad son valores elementales en la vida diaria.

La investigadora en análisis semiótico, manifiesta que el amor y la amistad son dos valores que deben de estar en construcción permanente, que no se trata de un asunto de fecha. “Regalar, recibir y tener un obsequio de la persona que se estima o se ama, alimenta el corazón y alegra el alma; no obstante, el amor no depende necesariamente de ese día de San Valentín, que tiene, además de la connotación individual, una denotación comercial propia de las sociedades capitalistas”, subraya Pantaleón.

Chocolates, flores y peluches Los chocolates, las flores y los peluches desfilan por la alfombra roja de San Valentín; todos los puestos comerciales están al día con cada uno de estos adornos y significativos accesorios. Los estudiosos en el área coinciden en que no se trata de un hecho a la ligera, cada uno de estos artículos comunica. El chocolate es una sustancia estimulante, elaborada a partir de una mezcla de cacao y azúcar, por sus condimentos se le denomina afrodisíacos.

“Para los que creemos en Dios, las flores son una de las más sublimes manifestaciones de su amor por nosotros, presente en la naturaleza”, expone la comunicóloga Dulce Pantaleón. Al referirse a los peluches, resalta que el más común y atractivo para esta fecha es el osito; por su textura suave y esponjosa.