¿Listo para el juego del béisbol?

El deporte es una activad necesaria en la vida de los seres humanos; crea emociones, ayuda a desarrollar destrezas y elimina fronteras. El béisbol como variedad deportiva constituye parte de la identidad cultural de la República Dominicana.

En las temporadas invernales, la radio, los televisores, las redes sociales y los estadios se convierten en los principales aliados de las familias para el disfrute de los juegos. A pesar de ser un deporte con gran matiz masculino, las mujeres y los infantes son parte de la red de fanáticos.

Los colores amarillo, azul, rojo, verde y naranja se ponen de moda en todo el país. La gente transita por las calles con banderas de sus equipos.

Es un juego que contagia al joven de la esquina, a los empresarios de la ciudad, a la madre que hace el café mañanero y a los niños que sueñan ser grandes jugadores de pelota.

La creatividad en los estadios Para María Esther Estévez, universitaria de 23 años, ser fanática significa pintar las iniciales de los equipos en los rostros de los seguidores para cada juego. Desde el año pasado se dedica a poner color a las expresiones faciales de la fanaticada en el campo. Cuenta que en principio era algo personal, pero que con el tiempo aumentaba el número de personas interesadas por llevar una insignia de su equipo.

Ciertamente, une todas las clases sociales en un solo público, en busca de ser espectador “uno a” de cada jugada. Es el espacio donde la alegría, el llanto, los nervios y el suspenso convergen.

Traspasa fronteras Juan Reyes, seguidor desde el extrajero, dice que hay que tener pendiente los permisos de trabajo para llegar temprano a casa y ver los juegos por televisión. ï Estar atento al calendario del juego para comprar las boletas a tiempo.

ï Ver las informaciones el día del juego, por saber los “line-up” o alineación.

ï Saber cuál es el lanzador abridor.

ï Usar atuendos del color su equipo favorito.

ï Conseguir el autógrafo de un jugador de tu equipo.

ï Organizar un grupo de niños, niñas y llevarlos al estadio.

ï Comprar las golosinas para preparar la garganta durante el juego.

ï Ir cómodos. Lo más recomendable, en tenis, camiseta y gorra.

ï Buscar una foto con el jugador de tu equipo.

ï Cruzar los dedos.

ïVivir cada base por bola, cada “Strike” o cualquier falla cuando estás en el noveno, no es nada fácil; la explosión de ansiedad se extiende desde la malla, hasta el último asiento. Los zapatos te aprietan, y el calor desaparece.

ïTodo fanático debe conocer el himno de su equipo, porque al finalizar el juego se entonan sus letras.