A Pico e’ Botella el arte de reciclar

Una botella de Porto, bebida predilecta de María Isabel Serrano, fue el detonante dentro de este recorrido en pro de la ecología que ya lleva tres años. Esa misma botella esperó su tiempo para luego ser transformada en una lámpara que adornó el árbol de mango de su jardín.

Así comenzó la labor de recuperar botellas de vidrio para otorgarles una nueva vida. “A Pico e’ botella” sabe exactamente cómo poner en práctica la “regla de las tres erres” (3R) acuñada por la organización ecologista Greenpeace: Reducir, Reutilizar y Reciclar.

“El reciclaje es parte de mi filosofía de vida; A pico e’ botella no es solo un reflejo de lo que creo y practico, es también un estilo de vida”, afirma María Isabel, encargada del verde negocio.

Ecología sostenible La idea central de A pico e’ botella se centra en recuperar las botellas de vidrio para luego utilizarlas como materia prima y darles una nueva oportunidad de uso. Serrano afirmó que recicla por convicción y amor al único planeta que poseemos. Ella cuenta que no puede quedarse indiferente al ver numerosas botellas de vidrio cuyo destino final es el vertedero, sabiendo que tardan unos 4,000 años en degradarse.

“El reciclaje es en sí mismo una filosofía de vida. Vivir en armonía y respeto con el medio ambiente; reducir nuestro consumo y elegir productos que permitan ser reutilizados o reciclados al final de su vida útil, clasificar los residuos en secos y húmedos, reutilizar o reciclar los secos y hacer composta con los húmedos. Conocer tu huella ecológica en planeta y llevar un balance entre lo que consumes y lo que aportas en la reducción de la huella”, compartió la amante del reciclaje.

Creación Ayudada por una maquinaria de su autoría, el proceso de elaboración de los productos se basa en el uso responsable del agua, energía y desinfectantes. Han diseñado un sistema de recirculación y filtrado del agua para las etapas de corte y pulido, lo que permite la reutilización antes de ser descartada. Los desinfectantes utilizados son biodegradables, lo que le permite usar el agua en el huerto del taller. ((“Cada pieza es una obra de conciencia y arte, una pieza única con historia de vida y mensaje proactivo de contribución a un ambiente limpio”, expresó María Isabel Serrano, propietaria del negocio. Escoger un camino más verde

Recién casados visitan los talleres para comenzar su nueva vida, optando por una opción más verde. Jóvenes de 15 años hasta adultos de 80 años, ese es el universo de personas que escogen seguir este camino ecológico.

En números “El 10% de las botellas que procesamos las recuperamos de lugares de expendios de bebidas, el 20% las traen clientes y el 70% de las botellas las compramos a precios justos a recicladores y recolectores de botellas, quienes hacen un trabajo indispensable en la cadena de reciclaje” dijo Serrano.

El trabajo de A Pico e’ Botella es demandado en Santo Domingo, La Romana, Bávaro, La Vega y por dominicanos residentes en el exterior.