Sin muchos ruidos resuelven para Texas
Ezequiel Durán y Leody Taveras, no exhiben las luces de varios coterráneos, pero con sus ofensivas contribuyen al éxito de Texas.
Leody Taveras comienza a dar connotaciones de las proyecciones que tenía desde que fue firmado.
No provocan los ruidos, ni exhiben las luces de varios de sus coterráneos, tampoco ocupan puestos en la parte alta de la alineación de su equipo, aun así Ezequiel Durán y Leody Taveras representan con sus bates factores trascendentes para que los Vigilantes de Texas disfruten de uno de los mejores récords en Grandes Ligas.
Ambos, están distantes de figurar en la docena de peloteros que superan en el plantel salarios por encima del millón de dólares, pero los dominicanos de tercero y segundo año mantienen en estos dos primeros meses una consistencia ofensiva de tal magnitud para que los texanos presenten foja de 46-28 con la que dominan el Oeste de la Americana, siendo la tercera mejor del béisbol, solo superada por el 52-25 de los Rays y el 48-26 de los Bravos.
Principalmente ocupantes de los puestos del séptimo al noveno bate, de forma callada, los dos se convierten en piezas importantes para un conjunto dirigido por el experimentado Bruce Bochy que figura a la vanguardia en bateo colectivo con un soberbio .275, que es séptimo en jonrones con 100 y primero en remolcadas con 433 y anotadas con 451.
Para un combinado, cuya nómina cuenta con figuras como Corey Seager, 32.5 millones, Marcus Semien 25.0 millones, Martín Pérez 19.6 millones, Nathan Eovaldi 17.0 y Jon Gray 14.0, Leodys y Ezequiel representan dos gangas que apenas devengan 733 mil para el centrocampista y 724 mil para el utility por la actual campaña.
Pero, que bien productivo y consistente ha sido este binomio. Al comenzar la jornada del viernes, Durán presentaba un consistente .310 (187-58) con nueve jonrones y 30 empujadas.
Ezequiel Durán se ha mantenido toda la campaña bateando por encima de la marca aristocratica.
Su average de .310 son 74 puntos más que los .236 que promedió en la jornada pasada. Este año ha sido tal su consistencia que batea para .317 contra los zurdos y .301 ante los derechos, amén de que ha bateado .302 en abril, .301 en mayo y en junio lo hace para .333.
Mientras que Leodys, solo vino a descender de la marca aristocrática el miércoles en que se fue de 4-0, lo hace para .299. En mayo su average fue de .368 y hasta el choque del miércoles bateaba para .295 en junio.
Hasta hace unos días, Taveras bateaba para .305, tanto frente a derechos como ante zurdos. De sus 214 turnos, solo siete no han llegado desde los últimos tres puestos en la alineación.
El caso de Ezequiel es casi idéntico, ingresó al choque del viernes con 187 turnos, de estos 87 son como séptimo bate, 47 como octavo, 13 de noveno y 17 de sexto. Se ha desempeñado en todas las posiciones, menos lanzador, receptor y centrocampista.
Y un aspecto trascendental es que batea para un robusto .372 en los triunfos de los texanos, equipo que busca registrar su primera marca ganadora desde que en el 2006 tuvo 95-67.
Con un promedio de .622, Texas estaría detrás de finalizar de una forma tan elevada desde que tuvieron 96-66 para un .605 en el 2011, que junto al 2010 fueron las últimas veces que estuvieron en los playoffs, en su caso la Serie Mundial.
Este año, Texas con su dueto de dominicanos, con un Seager que average superbo de .362, un Adolis García que cuenta con 58 empujadas, Semien 54 y Jonah Heim 54, un Josh Jung que suma 15 jonrones hacen pensar que Texas patrullará a lo grande la campaña, pues aventajan a los Astros por 5.5 partidos en el Oeste.
Leodys y Ezequiel pasan de ser agradables sorpresas a piezas claves para que el conjunto tenga serias intenciones de disputar los playoffs en esta temporada.