La meta una medalla olímpica

Para salir del fondo de la pobreza se necesita de trabajo arduo y determinación. Sin importar las caídas, tener la capacidad para levantarse, salvar los obstáculos y seguir adelante en busca del objetivo.

La atleta Crismery Santana Peguero, quien recientemente ganara una medalla de bronce en el Campeonato Mundial de Levantamiento de Pesas celebrado en Doha, capital de Qatar, vive junto a su madre Cándida Peguero Reyna, en un pequeño apartamento rentado del populoso sector de Barrio Lindo de esta ciudad de San Pedro de Macorís.

Desde niña ha vivido la amarga experiencia de vivir en la pobreza y lo que es la carencia.

Se ha enfocado en convertirse en una atleta de primer nivel, capaz de ganar medallas Centroamericanas y del Caribe, Panamericanas y llegar a unas olimpíadas y subir al podium. En lo personal, aspira convertirse en una abogada y todo para dar un giro a la vida de su familia, especialmente de su madre. Lo principal que busca es tener un hogar digno donde sus padres puedan vivir.

Es la menor de cinco hermanos y su madre ha tenido que trabajar por años en la zona franca de aquí para levantar la familia.

A partir del año 2001 Santana comenzó a sentir lo que era vivir en carencia y ver los sacrificios de su madre para llevar el sustento al hogar cuando residían en la ciudad de Hato Mayor, de donde su madre tenía que viajar a la zona Franca de San Pedro de Macorís a realizar labores como operaria.

Desde entonces Crismery ha vivido en carne propia lo que es vivir en carencia y precariedad. Se ha determinado trabajar para superar esa situación.

Migración Desde 2009 ha acompañado a su madre Cándida Peguero Reyna en ese periplo de vicisitudes. Ambas viven en un apartamento en cuya sala tienen la cocina, un comedor, nevera, un baño y una habitación.

“Aquí pagamos tres mil pesos (de renta)”, dijo su madre Peguero Reyna, quien devenga un salario de 1,900 pesos semanales y con ello debe pagar la renta, luz,agua, teléfono y cable, entre otros servicios. Ah, además comer.

Crismery se ha ido superando. En la actualidad cursa estudios en la universidad Interamericana donde ha comenzado la carrera de derecho. Pertenece al equipo de pesistas de la Policía Nacional y ha sido ingresada al programa Parni del Ministerio de Deportes.

“Tengo que cubrir mis gastos y lo poco que queda ayudar a mi madre”, dice Crismery.

Sus esfuerzos y propósitos se han ido cumpliendo poco a poco a pesar de los obstáculos. Recuerda con amargura el momento que quedó fuera del equipo que asistiría a los Juegos Centroamericanos y del Caribe de Veracruz en 2014, sin embargo, ha continuado y decidida a triunfar. “Ese momento me ha llenado de valor”, afirma, tras señalar que en esa ocasión estaba haciendo el mayor de los esfuerzos para integrar el equipo.

“Desde ese momento me puse la meta de estar entre las primeros planos y he trabajado duro, recibiendo buenos consejos de gente como Beatriz (Pirón), Yuderkis (Contreras), William Ozuna (presidente de la Federación de Pesas), Héctor Domínguez (entrenador) y muchos otros compañeros”, declaró Crismery con satisfacción.

La medalla Acaba de lograr una medalla de bronce en un Campeonato Mundial de Pesas, tras lograr una alzada de 107 kilos en la barra en arranque y 133 en envión, totalizando 240 kilogramos. Las alzadas en arranque y total constituyen marcas nacionales.

Crismery ha tenido una carrera que viene de menos a más. “Me esfuerzo al máximo para conseguir la mejor preparación y sacar buenos resultados”, sostiene la atleta de 21 años.

Cerró sus declaraciones tomándole la palabra al Ministro de Deportes, licenciado Danilo Díaz, en el sentido de que este reconocerá el esfuerzo de los deportistas. “Ha comenzado bien. Todo lo que he visto es muy positivo porque lo que dice estimula al esfuerzo y la superación”.